Han sido necesarios cuatro años para que Proyecto Hombre en Córdoba haya podido empezar a hacer uso completo de las instalaciones, ya reformadas, que albergaban al antiguo centro de salud de Huerta de la Reina. Esto viene a resolver un problema de espacio que padecían con un número de usuarios cada vez más alto.
La adecuación y actualización del edificio, sito en la calle Beatriz Enríquez 1, supone un empuje a la labor que desarrollan en esta asociación así como a la posibilidad de llegar a ser un referente "moderno, cercano y diverso, para atender a las personas que buscan ayuda en cuanto a los comportamientos adictivos" apunta su presidente, Jesús Tamayo. A día de hoy, según explica, pueden dar respuesta a todos los que demandaban servicio pero a los que era complicado atender por falta de espacio. De de manera más concreta, en este mes han iniciado una transición para abrir un nuevo recurso para personas con patología dual, es decir, aquellas que tienen una conducta adictiva y la comparten con un trastorno de salud mental. Señala Tamayo que, aunque ya se les venía atendiendo, el número de usuarios con este perfil ha aumentado “considerablemente” dándose la casuística de que los trastornos que presentan son, además, más graves. “Los procesos habituales estaban dejando de ser tan efectivos con estas personas” subraya. De aquí a fin de año esperan tener los grupos específicos para estos pacientes.
Usuarios
En Proyecto Hombre la media general refleja una atención en torno a 340 o 350 familias si bien, en el caso concreto de este centro, la foto del día a día arroja, sumando todos los recursos de los que disponen, una asistencia a unas 180 o 200 personas. En el Centro de Día para Personas sin Hogar tienen un aforo para 20 usuarios, “como van viniendo en distintos momentos conseguimos atender diariamente a unas 60 personas”, añade el presidente.
Esta obra presta ayuda también en Lucena a través de la Asociación Despertar, si bien el total de las terapias son supervisadas desde el centro cordobés. Todos los programas ambulatorios que se realizan en la capital se hacen igualmente en dicha localidad, “con la intención de expandirnos por el resto de la provincia en zonas donde se nos está demandando pero que dependerá, por supuesto, del músculo económico que vayamos consiguiendo” asume Tamayo.
Trabajar la prevención
Desde hace tiempo en Proyecto Hombre incorporan la prevención (universal, indicada y labora) como parte de sus programas. A lo largo de 2021 participaron en ellos más de 1.600 personas. Asimismo, abordan la atención a mujeres, con itinerarios específicos para atender las circunstancias especiales que presentan (hijos, maltrato, pobreza, prostitución). Durante el pasado ejercicio fueron 45 las que recibieron asistencia. El porcentaje de mujeres atendidas supone el 18,5% y de estas, el 43,5% es por consumo de hipnosedantes y el 23,2% por consumo de alcohol. También hay un alto porcentaje que presentan problemas de adicciones comportamentales (compras, y juego).
En este centro ha sido necesario incorporar el tratamiento de comportamientos adictivos sin sustancia, tecnologías, patología dual, y otras líneas de atención como la reinserción social y laboral, atención a personas sin hogar o programas dentro de la comunicad intrapenitenciaria. En total han sido 682 personas las que acudieron a alguno de dichos programas y 469 los familiares atendidos.
Otras cifras
Alrededor del 30% de quienes se han acercado hasta esta asociación lo han hecho con problemas de consumo de cocaína, el 28% por consumo de alcohol y el 15% por adicción de cannabis y heroína. Los menores atendidos representan un 3,5% más que el pasado año. La adicción con sustancia en este colectivo es fundamentalmente por cannabis además de las adicciones comportamentales.
Jesús Tamayo ha querido reconocer y agradecer el apoyo recibido por parte instituciones y organismos como el Ayuntamiento de Córdoba, la Junta de Andalucía, la Diputación, el Cabildo Catedralicio, empresas privadas, CECO, Fundecor o la UCO entre muchas otras, además del personal voluntario que mueve la asociación. Gracias a este impulso a partir de ahora cuentan con 24 salas de trabajo, 17 para atención a usuarios, 7 salas para el personal y dos salones de usos múltiples. El Centro de Día para Personas Sin Hogar está dotado con todo lo necesario para dar servicio de comidas, aseo y duchas, lavandería, ropería, cocina y los despachos de la Trabajadora Social y psicóloga.
