El congreso Educando en valores ha reunido este jueves en el Gran Teatro a cientos de estudiantes de varios colegios e institutos de Córdoba, con el objetivo de concienciar a la juventud de la importancia de crecer en "un mundo mucho más justo, inclusivo, equitativo y solidario". La actividad ha sido organizada por la asociación Sonrisa de Lunares y por el movimiento Desde Siempre para Siempre, con la colaboración de las concejalías de Educación y Servicios Sociales del Ayuntamiento de Córdoba. entre otras entidades.
Sonrisa de Lunares presta atención a niños con discapacidad u otras necesidades que carecen de recursos y también a pacientes infantiles del hospital Reina Sofía que requieren cuidados paliativos. La asociación nació en memoria de Michele González, hija de Luis González, presidente de Sonrisa de Lunares, y María Ángeles Pérez. Michele murió muy joven de una enfermedad oncológica, mientras que el movimiento Desde Siempre para Siempre surgió en Pozoblanco en recuerdo de Antonio Díaz Martos, que falleció a los 15 años de una leucemia atípica para la que aún no hay cura, y como fuente de inspiración de la visión de la vida que tuvo este joven.
Imposible no emocionarse con las palabras de María Ángeles Martos, madre de Antonio Díaz, que ha expuesto a los estudiantes presentes que su hijo tuvo que enfrentarse a ocho años de lucha contra una enfermedad. Se sometió a tres trasplantes y a muchos tratamientos. "Cuando la enfermedad le daba una tregua a Antonio la vida era hermosa, pero llegó un momento en el que nos dijo que no podía más. Con mucho dolor y pena tuvimos que aceptar su decisión. Mi hijo disfrutó cada minuto", ha apuntado María Ángeles Martos.
Martos ha añadido que "Antonio dejó cartas a muchas personas queridas y le gustaba decir el lemaDesde Siempre para Siempre, que es el que hemos escogido para trabajar valores en la juventud a través de la lección de vida que nos dio mi hijo".
El ejemplo de superación de Irene Villa
El congreso ha contado con la intervención igualmente emotiva de la periodista y psicóloga Irene Villa, que durante su exposición ha desgranado lo que le supuso prácticamente volver a nacer cuando tenía 12 años, ya que junto a su madre fue víctima de un atentado de la banda terrorista ETA. En aquel atentado, ocurrido hace 31 años, Irene Villa perdió las piernas. Villa ha indicado que ese día se escuchó antes una bomba, pero que su madre la tranquilizó diciéndole que a ellas no les podía pasar eso porque "no eran importantes".
"Fue un milagro salir viva de aquella trampa mortal", ha recalcado, asegurando que su padre le dijo a los médicos que si su hija, que se había quedado sin las extremidades inferiores, iba a sufrir demasiado mejor que no siguieran adelante. Sin embargo, finalmente los profesionales del hospital lograron salvarle la vida, mientras su madre se despertaba en otro hospital.
Además de repasar este duro hecho que ha marcado su vida, Irene Villa ha hecho referencia a que los jóvenes de hoy "deben tener energía y ganas de comerse el mundo, a la vez que contar con herramientas para afrontar situaciones complicadas que se les pueden presentar". "La vida nos para en el momento más inesperado, pero no hay que tener miedo a renacer y a afrontar la vida con pensamiento positivo", ha manifestado, a la vez que ha instado al público joven presente a que afronte con paciencia y sacrificio retos a medio y largo plazo y que aprenda a comprometerse y a trabajar en equipo dentro de la sociedad de la que forma parte.
Petición a los jóvenes para que sean solidarios
En el congreso también han intervenido Luis González, para repasar la labor que realiza Sonrisa de Lunares y hacer llegar a los jóvenes asistentes la importancia de ser solidarios, así como Anxo Pérez, un emprendedor español, que ha expuesto la labor que lleva a cabo para tratar de que muchas personas aprendan a darse cuenta de que cuentan con un potencial que no saben aprovechar. También ha actuado dentro de esta actividad Nathan Music.
Numerosas autoridades han respaldado con su presencia el congreso, entre las que se encontraba el alcalde de Córdoba, José María Bellido, que ha mostrado su admiración por la energía y por los proyectos solidarios que sacan adelante algunas personas después de sufrir momentos de mucho dolor.