Los bomberos de Córdoba han "puesto en venta" los dos parques que tiene la ciudad, uno situado en la avenida de los Custodios, colindante a la comisaría de Policía Local, y el ubicado en el polígono del Granadal. Se trata de una acción reivindicativa que pretende llamar la atención del estado en el que se encuentra las infraestructuras municipales que tienen los bomberos en la capital cordobesa, por lo que los dos edificios han amanecido con numerosos carteles de ‘Se vende parque de bomberos’. Se trata de una acción impulsada por todos los miembros del servicio en Córdoba, que no se atribuye ningún sindicato en particular aunque todos lo respaldan.
Las quejas por el mal estado de los parques de bomberos no son nuevas, ya que el colectivo lleva varios años reclamando mejoras sobre todo en el parque de los Custodios, con más años de antigüedad. El equipo de gobierno tiene de hecho planes de construir un nuevo parque y destinar el actual a la ampliación de la comisaría de Policía Local. El pasado mes de marzo, el equipo de gobierno desveló dónde se ubicará ese futuro parque: en una parcela municipal entre la zona de expansión de Poniente y Miralbaida. Las futuras instalaciones serán similares al parque de Granada y mantendrán los tiempos de intervención gracias a la proximidad de la ronda, según explicó entonces el responsable del servicio, el concejal Miguel Ángel Torrico.
”Llevamos arrastrando muchísimos problemas dentro del Servicio de Extinción, Incendios y Salvamento de Córdoba y gobierno tras gobierno nadie coge la sartén por el mango y no se tiene en cuenta un servicio tan importante para la ciudad”, explica Gabriel Merchán, secretario general del SAB.
El detonante de las quejas: la nómina
El detonante de la actitud de los bomberos ha sido un informe de Recursos Humanos, emitido a raíz de la reclamación de un policía local, que dictamina “una bajada de sueldo de una variable retributiva que ya teníamos consolidada y estábamos percibiendo desde 2018”, explica Merchán. Los bomberos consideran que se vulnera el principio de la condición más beneficiosa para el trabajador y que “esto afecta a todas nuestras familias y no lo vamos a consentir”. El plus, oscila según los turnos trabajados, ronda los 80 euros mensuales.
Además, los bomberos se quejan de la falta de mandos intermedios que suplan la ausencia del jefe de bomberos y solicitan el cese de la directora general de Recursos Humanos.