La escalada de los precios de la energía está generando dificultades para empresas cordobesas, que en los últimos días observan con preocupación cómo se agudiza el encarecimiento de suministros básicos a consecuencia de la guerra de Rusia contra Ucrania. Las entidades consultadas coinciden en subrayar los efectos negativos que esta situación está teniendo en el tejido productivo y confirman que en algunos casos compromete la viabilidad de sociedades que todavía se están recuperando del impacto de la pandemia de coronavirus. El presidente de la comisión de Industria y Energía de la Confederación de Empresarios de Córdoba, Isidro López Magdaleno, afirma que, «sin duda, los altos costes de la energía van a comprometer la actividad de todas las empresas. Las facturas se están duplicando respecto a hace seis meses. Estamos en líneas inasumibles», asegura.

López Magdaleno destaca que «hay empresas que se están pensando el parar» y alude a la «incertidumbre» sobre los precios. «Ayer (por el martes pasado) llegamos a puntas de 700 euros el megawatio hora. Ya nos parecía caro cuando estaba ocho veces más barato, hace seis meses o un año», recuerda.

De este modo, hay que destacar que el precio medio de la electricidad en el mercado mayorista alcanzó un máximo histórico el martes pasado al rozar los 545 euros por megawatio hora. En el día de ayer, se esperaba que el máximo rozara los 453 euros, lo que supuso una bajada que continuará hoy, previsiblemente. Sin embargo, para tener una idea de la relevancia de la subida experimentada hasta el momento, hay que recordar que, de acuerdo con la información del Operador del Mercado Ibérico de la Energía, en marzo del 2021 los precios máximos de la luz no sobrepasaron los 100 euros en ningún momento. Este jueves se ha previsto que el valor medio sea de 369,75 euros.

También los combustibles han llegado a niveles nunca vistos con anterioridad, según las cifras publicadas por el Ministerio para la Transición Ecológica. Si se observa la serie histórica iniciada en el 2006 (no hay información provincial para los ejercicios precedentes) los precios más elevados hasta el momento se registraron en torno al año 2013, cuando la gasolina 95 costó una media de 1,44 euros por litro y el gasoil, 1,37 euros en Córdoba. El último informe se refiere a enero del 2022 e indica que el precio medio de la gasolina 95 fue de 1,49 euros por litro (una de las diez más baratas de España) y el del gasoil, de 1,37 euros (entre las once más baratas).

Asfaco destaca el impacto de los precios energéticos en los costes de producción

En las últimas semanas, no obstante, los carburantes han experimentado una fuerte subida que les ha llevado a rozar los dos euros por litro en algunas estaciones de servicio de la provincia. Así, la gasolina 95 más cara de Córdoba se pudo adquirir ayer a 1,969 euros por litro, mientras que el dato de la más barata se refiere al lunes pasado y la sitúa en 1,259 euros. Uno de los aspectos más llamativos de la situación actual es la escasa diferencia entre los precios de los distintos combustibles y, de hecho, la información del ministerio apunta que la gasolinera más cara vendía ayer el gasóleo a 1,919 euros y la más económica (el importe vuelve a ser del lunes pasado) lo ofrecía a 1,109 euros.

El presidente de la comisión de Industria y Energía de la patronal comenta que «la única noticia que da algo de esperanza es ese techo que van a poner a los precios de la energía» en el ámbito europeo, y admite que «tendría que haber estado listo hace seis meses», ya que «las empresas tenemos que saber dónde está nuestro límite. Ese techo es una protección para poder seguir trabajando», aclara.

Fabricantes

De su parte, el presidente de la Asociación de Empresas Fabricantes y de Servicios de Córdoba (Asfaco), Jesús Coca, explica que el encarecimiento de la energía «está suponiendo un indiscutible encarecimiento de los costes de producción que a medio plazo sí puede suponer un problema de viabilidad». En este sentido, la subida del precio del gas, motivada por el conflicto bélico de Rusia y Ucrania, ha disparado también el coste de la luz, y Coca reivindica que «habría que tomar medidas realistas para establecer el precio de la energía, acordes a la situación actual, separando el precio del gas del coste global de la producción de la energía».

ATA avanza otras consecuencias como la caída del consumo

Los autónomos

Por último, el presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA) de Andalucía, Rafael Amor, califica como «brutal» la subida del coste energético y confirma que «perjudicará a los autónomos y pequeñas empresas». Este responsable precisa que «no solo tenemos el coste real del componente energético, sino que las materias primas van a subir», y alerta también de que «venimos de una pandemia de la que dos de cada tres autónomos aún no se han recuperado económicamente, se está haciendo inviable la actividad económica».

El presidente de ATA Andalucía critica que «en España se ha hecho un cambio radical en el que hemos prescindido de la energía nuclear y del carbón», e indica que este es uno de los factores que incide en la situación actual. Amor adelanta que el escenario actual «puede llevar al cierre de empresas» y recuerda otros posibles efectos como la pérdida de poder adquisitivo de los ciudadanos y la caída del consumo. «Están en juego 10 años de crisis económica», afirma.

La petición de ayuda se cuadruplica

La subida de los precios de los suministros energéticos ha motivado que las peticiones de ayuda realizadas por las empresas cordobesas se multipliquen en el último año y la previsión es que la demanda será «muy importante» en la próxima convocatoria, según afirma la concejala de Reactivación Económica e Innovación del Ayuntamiento de Córdoba y presidenta del Instituto Municipal de desarrollo Económico y Empleo (Imdeec), Blanca Torrent, quien explica que «es uno de los conceptos que más demandan empresarios y profesionales, ese apoyo desde el ámbito local y hasta donde podemos llegar». En el 2020, cuando la declaración de la pandemia de coronavirus tuvo un fuerte impacto en la actividad económica, las ayudas del Imdeec para cubrir los gastos de suministros registraron 418 solicitudes, aunque finalmente fueron beneficiarias 339 empresas y se destinaron 458.457 euros. En el 2021 habilitó dos líneas que contabilizaron 2.352 demandas y se atendieron 1.219 con una cuantía de 2,9 millones de euros. «Hemos casi cuadruplicado los beneficiarios de ayudas que han optado a la coberura de suministros, entre ellos, la luz», precisa esta responsable municipal. Torrent avanza, además, que en las bases de las ayudas para el 2022 se recogerá una línea específica para estos gastos. Esta concejala recuerda que «el 90% de los empresarios cordobeses tienen no más de diez trabajadores, por lo que este incremento en los suministros los mata». En este sentido, confirma que «el aumento de los costes está poniendo en peligro la viabilidad de las empresas. Nos vamos a encontrar una situación muy delicada para nuestros profesionales». Sobre las consecuencias de esta situación en el tejido productivo, la presidenta del Imdeec señala, además, que «hay empresas que lo están pasando muy mal. Nos están diciendo que se plantean que pueda salir personal, lo que no quiere nunca un empresario es cerrar, intenta que no salga en su conversación, pero indiscutiblemente nos preguntan por las ayudas». De este modo, opina que «lo bueno sería que hubiera desde el Gobierno central unas medidas que no llegaran a esta situación, a perjudicar de esta manera», ya que el Imdeec tendría que dedicarse al «incremento y apoyo del fortalecimiento» de las empresas, respaldando la contratación y «no la subsistencia».