Los datos del Instituto Nacional de Estadística lo dejan claro. Casi siete de cada diez las hipotecas constituidas sobre viviendas el año pasado en España se firmaron con cuota fija frente a un 32% de hipotecas con tipo variable. A la hora de elegir el tipo de hipoteca, lo importante es conocer las prioridades de la persona que firma y sus condicionantes. 

Habitualmente, la hipoteca fija se recomienda a quienes prefieren tener la seguridad de pagar siempre la misma cuota mensual y protegerse de posibles subidas en los tipos de interés que puedan producirse en el mercado a lo largo del periodo de pago. Hay que valorar también que las entidades financieras suelen conceder préstamos hipotecarios fijos con un plazo de devolución más corto, a diferencia de las hipotecas variables, que suelen concederse por un periodo más largo. Por su parte, una hipoteca variable es mejor para quienes desean pagar poco a corto plazo y no les importa si la cuota cambie, asumiendo una posible subida de la cuota.  

Pero ¿cuál es la razón por la que ahora se están cerrando más hipotecas a cuota fija que variable? La explicación es sencilla, según Víctor Martín, director de Tucasa Córdoba, encargado de asesorar a muchas de las familias que acuden a diario a cerrar una operación inmobiliaria. «En este momento, el dinero en España está muy barato, en los más de 22 años que llevo vendiendo pisos en Córdoba, nunca había estado tan bajo como ahora, por eso es un buen momento para firmar una hipoteca, y para aprovecharse de los bajos tipos de interés que se están dando». Según Martín, «las hipotecas de tipo fijo se están firmando a un 1,4%, algo que era impensable hace unos años». De esta forma, una hipoteca media de unos 100.000 euros más los gastos, para una persona de menos de 35 años por un periodo de 30 años supone una cuota fija de unos 350 euros mensuales. Según Víctor Martín, «el precio de los alquileres es muy superior, en Córdoba no hay prácticamente alquileres por ese precio, por lo que la mejor opción es la compra de vivienda, que constituye un valor seguro».

En su opinión, «este es sin duda el momento de comprar una vivienda». En cuanto a la opción de cuota fija o variable, también lo tiene claro. «Si fuera yo quien compra un piso en este momento, firmaría cuota fija sin pensarlo para garantizarme que voy a pagar lo mínimo durante todo el periodo de hipoteca», explica, «en el momento en el que los tipos empiecen a subir, habrá que ir mirando porque la subida del euríbor, que actualmente está en negativo» (en torno a -0,33%). «Con un 1,4% o un 1,5% fijo, no me lo pienso, pero si es más alto, igual no merece la pena pagar 80 euros más para asegurarte de que no suba la cuota cuando el Euríbor me permitiría ahorrarme una cantidad importante durante una serie de años», añade.

El portal Idealista señala que «no hay hipoteca perfecta, sino que la elección depende de las circunstancias personales y financieras de cada persona», por lo que consideran que hay que estudiar el tipo de empleo, sueldo, el periodo de financiación, el plazo en que se quiere pagar hipoteca y la perspectiva de futuro antes de decidir. Además, llaman a consultar en varios bancos y negociar las condiciones antes de decantarse por una opción concreta.