El confinamiento derivado del primer estado de alarma decretado con motivo de la pandemia del coronavirus, el 14 de marzo del año pasado, supuso una lógica caída de la criminalidad en toda España, y también en Córdoba. Las medidas impuestas después, muchas de las cuales aún siguen vigentes, continúan incidiendo en este descenso.

Las cifras, recopiladas por el Ministerio del Interior a través de los datos aportados por la Policía Nacional, las autonómicas, las locales y la Guardia Civil, ya dejaron ver la incidencia del confinamiento en la criminalidad, algo que se sigue manteniendo. Así lo expone el propio Ministerio del Interior en un documento, en el que apunta que «dicho descenso en parte está ligado con las circunstancias derivadas de la entrada en vigor de los reales decretos 463/2020, de 14 de marzo y 926/2020, de 25 de octubre por los que se declaró el estado de alarma para la gestión de la situación de la crisis sanitaria ocasionada por la covid-19, así como con el resto de medidas adoptadas por las administraciones para hacer frente situación sanitaria. El primer decreto de estado de alarma estuvo vigente hasta el día 21 de junio de 2020, y estando el segundo prorrogado hasta el día 9 de mayo de 2021 por el Real Decreto 956/2020, de 3 de noviembre».

Delito a delito

En el caso de la provincia de Córdoba, los delitos disminuyeron un 7,2% durante el primer trimestre de este año, en comparación con el mismo periodo del año anterior. Cabe recordar que ya en ese trimestre en el 2020 hubo dos semanas de confinamiento total.

Mientras entre enero y marzo del año pasado se registraron 6.106 delitos, en el mismo periodo de este año la cifra se quedó en 5.665. A falta de consolidar los datos, todas las tipologías penales que se recogen en la estadística se resintieron a principios de año. Hubo una que lo hizo más que el resto, los secuestros, que cayeron un 100%. Sin embargo, esto apenas es representativo, teniendo en cuenta que el año pasado se confirmaron dos y este año, ninguno. Dentro de las tipologías penales, los delitos más numerosos siempre son los hurtos y los robos. Los hurtos disminuyeron a principios de este año más de un 29%, pasando de 1.339 el año pasado a 947 en este ejercicio. Los robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones fueron en el primer trimestre de este 2021 un total de 217, cuando el año pasaron llegaron a 346, por lo que han caído un 37,3%. Dentro de estos, los robos en casas disminuyeron cerca de un 28%. La sustracción de vehículos cayó algo menos, un 7,5%, pasando de 53 robos de coches el año pasado a 49 en este ejercicio.

Con respecto a los delitos contra la indemnidad sexual, sumaron en el primer trimestre un total de 45, prácticamente la mitad que el año pasado, que fueron 84. Dentro de estos, se redujo significativamente la agresión sexual con penetración, pasando de ocho a dos.

En cuanto a los homicidios, tampoco son representativos de la criminalidad en Córdoba. En el primer trimestre del año pasado hubo uno y en el del este año, otro. Sí cayeron los homicidios dolosos y asesinatos en grado tentativa, pasando de cinco a cuatro.

Los delitos graves y menos graves de lesiones y riña tumultuaria bajaron un 3,3% (solo dos menos en un año, 60 el año pasado y 58 en este 2021).

Significativa fue la caída de las infracciones penales relacionadas con el tráfico de drogas. Aquí, Interior informa de 76 delitos el año pasado por los 45 del primer trimestre de este año, lo que supone un descenso de casi un 41%.

Los delitos bajan en la capital

La caída de la criminalidad también se percibe en los datos de la capital, no así en las cifras de los municipios cordobeses de más de 20.000 habitantes, a excepción de Puente Genil.

En el caso de Córdoba capital, según los datos de criminalidad del Ministerio del Interior, los delitos cayeron un 14% durante el primer trimestre de este año en comparación con el mismo periodo del año pasado. La caída fue generalizada en todas las tipologías penales, a excepción de dos: los delitos contra la indemnidad sexual, que subieron un 17,9%, y los homicidios dolosos y asesinatos en grado tentativa, que aumentaron un 50%, pasando de dos a tres.

En la segunda localidad de la provincia más poblada, Lucena, sin embargo, la criminalidad aumentó más de un 19% en el periodo señalado. La razón, una importante subida en infracciones relacionadas con el robo de coches, el tráfico de drogas y el robo con fuerza en viviendas. En Lucena solo cayeron los delitos graves de lesiones, contra la indemnidad sexual, los hurtos y los robos con intimidación.

La situación de Lucena se repitió en otras grandes localidades cordobesas, como Montilla, donde los delitos aumentaron un 3,3%, Palma del Río con una subida del 7,4% y Priego de Córdoba, donde el aumento fue de un 2,7%. El único municipio de más de 20.000 habitantes donde se redujo la criminalidad además de en la capital fue en Puente Genil, donde cayó un 4,2%.

A nivel provincial en Andalucía, todas las provincias vieron reducir su actividad criminal durante el primer trimestre del año, a excepción de Huelva, donde creció un 0,3%.