Los depósitos del Archivo Histórico Municipal disponen ya de un pionero sistema contraincendios para proteger los documentos históricos del fuego y de un sistema de climatización que los mantendrá en su estado óptimo. La idea es que estas instalaciones, cerradas desde diciembre del 2018 por obras, puedan ponerse en funcionamiento lo antes posible. La actuación que estaba prevista en principio en 18 meses, pero que acumula ya bastante retraso, debía haber concluido este mes de abril, pero las lluvias han impedido que esto ocurriera.

«La UTE --formada por Magtel y Martín Casillas-- está mostrando todo su esfuerzo para que se pueda finalizar la capa de acabado del revestimiento de mortero de cal sobre todos los paramentos que quedan al exterior, como son los de los patios y los de la fachada. Esta capa no puede realizarse durante épocas de lluvias en paramentos externos dado el material de su composición y la imposibilidad de la ejecución, siendo esta la causa fundamental por la que no se ha podido concluir esta actuación», informa el presidente de Urbanismo, Salvador Fuentes.

En estos momentos está ya ejecutada tanto la acometida de electricidad como los elementos de climatización e iluminación de los mismos, así como los de protección contraincendios, que se pondrán en breve en funcionamiento. Ayer mismo «se han estado realizando las comprobaciones de cierre de circuitos de la instalación de inertización que protegerá del fuego los valiosos documentos existentes en el Archivo Municipal, y que está siendo llevada a cabo por la empresa instaladora», explica Salvador Fuentes.

Por otra parte, se encuentra en estado muy avanzado la redacción del proyecto de terminación de las actuaciones pendientes en el resto del edificio, que se debía haber concluido ya para sacarlo a concurso en abril, pero que se retrasará hasta mediados de año.

Por ahora se ha realizado ya una prospección y valoración de las actuaciones que están pendientes, casi todas vinculadas a la restauración de elementos patrimoniales del edificio histórico. En concreto, se trata de actuaciones de acabado de los alfarjes (artesonados de madera) y los aljimeces; también se aplicará el tratamiento final a las fábricas de sillería tanto del interior como de la portada de la fachada; mientras que las vidrieras de las ventanas de la primera planta se restaurarán y se devolverán a su posición original, protegiéndolas hacia el exterior con nueva carpintería.

Sobre la portada mudéjar, descubierta durante estas obras, que recae al patio segundo se realizarán las actuaciones de encuentro con el alfarje de la galería del patio y el correspondiente llagueado. Asimismo se han descubierto situaciones a corregir en el edificio, que habrá que documentar, por ejemplo, todo el pavimento de las galerías. Tendrá que desmontarse para asegurar la base y recolocarlo de nuevo en su posición original, para que el inmueble mantenga su imagen histórica. Se hará también una actuación sobre el pavimento de chino cordobés de los patios, de forma que se recupere su fisonomía y los parterres existentes en ellos.