La obra del eje Realejo-San Lorenzo comienza la semana que viene. La Delegación de Infraestructuras ha informado esta mañana del inicio de esta actuación en la primera semana de mayo. La actuación, proyectada en el anterior mandato, persigue unificar la apariencia urbanística de este eje que nace en San Pablo y muere en la calle María Auxiliadora. Mientras que daba comienzo la obra, el departamento de Movilidad y la empresa municipal de Aucorsa han trabajado en dar solución a uno de los aspectos más comprometidos de esta intervención municipal: la ordenación del tráfico durante 4 meses en una vía fundamental para la entrada de todos los vehículos que provienen de la zona de Levante hacia el centro. 

La actuación para peatonalizar el eje Realejo-San Lorenzo, unas obras que salieron a concurso en agosto del año pasado, convertirán en un espacio con preferencia peatonal la calle Santa María de Gracia. Esta calle presenta ahora deficiencias en materia de accesibilidad y un acerado estrecho con bordillos que dificulta el tránsito. Con esta obra, la calle tendrá una plataforma única. Además, los trabajos ensancharán la calle y la plaza Arroyo de San Lorenzo, que también están en muy mal estado y carecen de accesos en condiciones para los garajes. Cuando acabe la obra, incluida en los proyectos que se sufragan con los fondos Feder dentro del programa Edusi, su aspecto será como el de la calle San Pablo y tendrá preferencia peatonal. La actuación tiene un presupuesto de 468.749 euros y tendrá un plazo de ejecución de 4 meses.

Con el comienzo de la obra se activa la fase 1 de tráfico

La primera fase será la más complicada por tanto las obras afectarán a toda la calle Santa María de Gracia. Cuando comiencen la semana próxima, el tráfico quedará cortado desde la plaza de San Lorenzo (las señales avisarán desde la plaza de los Padres de Gracia) y no se podrá seguir subiendo hacia el centro. Para llegar al casco habrá que acceder a través de la Puerta del Rincón. Por la calle María Auxiliadora podrán circular los residentes y se invierte el tráfico de la calle Arroyo de San Rafael para dar salida a quienes viven en esa zona por las calles Buen Suceso, Arroyo de San Andrés y Enrique Redel. 

En la segunda fase la obra se centrará en la intersección de Santa María de Gracia, Arroyo de San Rafael y Arroyo de San Lorenzo. En esta fase, el Ayuntamiento convertirá la calle Arroyo de San Rafael en vía de doble sentido, pero terminará en fondo de saco antes de desembocar en Juan Bernier. Además se cambia el sentido de la calle Muñices para facilitar la entrada de residentes a la zona, de hecho solo ellos podrán acceder desde el Alpargate, a menos que en San Lorenzo se quiera girar hacia Jesús del Calvario para salir de nuevo al Alpargarte como a Arroyo de San Lorenzo para ir a Puerta Nueva. Jesús del Calvario queda como fondo de saco y doble sentido para cocheras, con entrada por Costanillas y Montero.

En la tercera fase, las obras serán en la plaza de San Lorenzo y el tráfico queda suspendido entre la calle María Auxiliadora y Santa María de Gracia. Arroyo de San Lorenzo queda en fondo de saco, pero la calle Muñices cambia de sentido para que pueda salirse al Realejo (es el recorrido que hará la línea C2). Los coches que bajan desde Arroyo de San Andrés lo harán de nuevo en el sentido habitual, pero los coches solo tendrán salida por Santa María de Gracia, ya que el resto de calles queda cortado al tráfico. 

En la cuarta fase de tráfico, la obra se centrará en Jesús del Calvario, y se podrá entrar a Arroyo de San Rafael pero como fondo de saco. Se dará servicio solo a los residentes y usuarios de cocheras. El tráfico por Muñices volverá a fluir en dirección de la plaza de la Magdalena, mientras que las calles Jesús del Calvario y Roelas (desde la calle Cristo) serán fondo de saco y doble sentido para residentes. Se anulará la zona ACIRE por Moriscos y Cárcamo.

En la quinta y última fase el tráfico recupera su sentido actual, a excepción del tramo afectado en la última actuación del proyecto (la calle María Auxiliadora que pega con la iglesia de San Lorenzo). Habrá un tramo en doble sentido para poder salir en dirección a la calle del colegio de los Saleasianos, es decir Santo Domingo el Savio (que tendrá doble sentido) y Antón de Montoro para salir a la avenida de Barcelona.

Por otro lado, la empresa de autobuses, Aucorsa, establecerá dos fases para seguir prestando el servicio de las dos líneas que suben al centro por este eje o circulan por alguna de las vías afectadas por los cortes que se producirán mientras duren las obras: la línea 1 (que cubre el recorrido entre Fátima y Tendillas) y la circular que prestan los microbuses. En una primera fase la línea 1 se desviará desde la calle Sagunto por Ollerías, plaza de Colón, Alfaros, Alfonso XIII y a partir de ahí retomará su recorrido habitual; mientras que el C2 en esa primera fase seguirá prestando servicio ya que se invertirá el tráfico en las calles Arroyo de San Rafael, Buen Suceso y Arroyo de San Andrés, para acceder a Isaac Peral donde se retomará el recorrido habitual en el Realejo.  En una segunda fase, la línea 1 continuará con el mismo recorrido, mientras que los microbuses se desviarán desde Ronda de Andújar por la plaza de la Magdalena hacia calle Muñices, y a partir de ahí retomarán su recorrido en el Realejo.