Diez tabernas y restaurantes de la Judería han decidido rendir un homenaje a la Cata de Vinos de Córdoba que se debería estar celebrando por estas fechas, organizando un itinerario entre los citados negocios para catar el vino de Montilla Moriles de cada una de las casas maridado con una de sus tapas más emblemáticas. La iniciativa se prolongará hasta el día 2 de mayo.

Según ha explicado a este periódico Laura Roda, presidenta de la Asociación Judería, promotora de la iniciativa, la actividad pretende ser “un guiño a la cata de vinos de Córdoba” al tiempo que se insufla un poco de ánimo a los responsables de estos negocios ubicados “en la zona cero” de la ciudad. “Como sabes, la Judería está completamente muerta con la pandemia y con esta propuesta algunos negocios que estaban cerrados han abierto y están viendo algo de actividad”.

La iniciativa, que está teniendo un buen resultado, según explica Roda, surgió de una manera inesperada a propuesta de uno de los socios de la organización y en pocos días se puso en marcha y consiste en que en los diez negocios participantes se ofrece al cliente que lo solicite un medio de vino y una tapa identificativa de la taberna por solo 3 euros. Añade la presidenta de la asociación Judería que no se ha organizado un itinerario como tal ni tampoco se sellan pasaportes, como también se hace en otros eventos similares, sino que los propios responsables de los negocios le sugieren al cliente participante por dónde debe seguir la ruta para probar el siguiente vino y la siguiente tapa.

Los bares participantes son Doble Cepa, Casa Bravo, Bandolero, Rincón de Carmen, Extremeño, El Cartuchito, El Capricho, Bodega Guzmán y La Posada del Caballo Andaluz. En todos ellos el vino que se ofrece es de la DO Montilla-Moriles y las tapas van desde las berenjenas a la miel hasta las croquetas de rabo de toro pasando por la ensaladilla, el pescaíto frito o las migas, entre otros.