La Fiscalía de Córdoba ha solicitado una condena de cuatro años y multa para B.R.T.L., cajera de un banco, y dos años y tres meses para su cómplice, I.M.D.O., por hurtar en el banco en el que ella trabajaba desde hacía más de una década más de 200.000 euros en distintas operaciones.

Según relata la calificación del fiscal, desde junio del 2018 hasta el 16 de enero del 2019 en que se produjo una auditoría, la acusada "aprovechó su posición de cajera y, abusando de la confianza del banco y de los empleados de la sucursal, se adueñó con ánimo ilícito de beneficio de 164.801,26 euros".

Asimismo, el 14 de enero del 2019, con la ayuda del también acusado I.M.D.O., autorizado en una cuenta mancomunada, realizó un reintegro de 25.000 euros sin la firma autorizada para realizar tal operación, adueñándose de esta cantidad. Ese mismo día, ambos se pusieron de acuerdo, según la fiscalía, para realizar un segundo reintegro de 13.000 euros en otra cuenta en la que él aparece como autorizado sin que existiera la firma necesaria para tal autorización. Posteriormente, él hizo entrega a la cajera de los 38.000 euros que, posteriormente, el banco tuvo que devolver a las cuentas correspondientes. Dos días después de ambas operaciones, tuvo lugar una auditoría en el banco.

El Ministerio Fiscal considera que se trata de un delito continuado de apropiación indebida con agravante de abuso de confianza en el caso de ella y solicita cuatro años de prisión y multa de diez meses a razón de 10 euros diarios. En el caso de su cómplice, solicita dos años y tres meses de prisión.