El Ayuntamiento repartirá un total de 200.000 mascarillas reutilizables a lo largo de los próximos seis meses para contener la expansión del covid-19 entre colectivos vulnerables y centros educativos, según ha explicado hoy la teniente de alcalde y delegada de Servicios Sociales, Eva Timoteo.

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Timoteo, que ha visitado la sede de la Fundación Prolibertas, ha señalado en rueda de prensa que en los últimos días se han comenzado a repartir 25.000 mascarillas entre centros de Educación Primaria e Institutos; que cuentan con un montante de 35.000 mascarillas que tendrán como destino las familias más vulnerables y que las recibirán por correo en sus domicilios y una tercera vía que serán los usuarios del comedor social de Prolibertas, muchos de ellos personas sin hogar.

En este sentido Eva Timoteo ha señalado que la inversión en mascarillas de una familia oscila entre los 150 y los 175 euros mensuales, una cantidad “inabarcable” para aquellas que cuentan con pocos recursos económicos, por lo que “si hay un momento en que la política tiene que ser útil de verdad a los ciudadanos es éste”. Por este motivo ha indicado que se han buscado mascarillas que puedan resistir hasta 74 lavados para que tengan larga duración y ha mostrado su satisfacción por el hecho de que haya sido una empresa cordobesa la que haya presentado “la mejor oferta”.

Por su parte, el coordinador de Prolibertas, Eduardo García, ha señalado que esta donación de mascarillas “para una población como la que trabajamos, con personas sin hogar y en riesgo de exclusión social” es algo “totalmente indispensable”. Además ha señalado que hasta el momento la fundación repartía una mascarilla por persona y semana, “porque no teníamos más posibilidades”, por lo que ha agradecido la colaboración de la delegación municipal.

Prolibertas da servicio de comedor dos veces al día a una media de 150 personas, a lo que hay que sumar unas 100 personas, de 30 familias diferentes, que reciben alimentos una vez por semana.

Por otro lado, Timoteo ha hecho referencia al proyecto de Prolibertas de ampliar su comedor en la sede de la fundación , en el edificio de la calle Sagunto que antiguamente ocupaba Cruz Roja. Sobre esta cuestión la delegada de Servicios Sociales ha explicado que las conversaciones “van por buen camino” y que el objetivo es “preservar “los intereses y las necesidades de todo el barrio”, por lo que “estamos intentando conjugar esta demanda de Prolibertas” con otras reivindicaciones vecinales, ya que “este edificio tiene posibilidades de dar cobijo a más necesidades”.