Rabanales 21 decidirá hoy si se acoge al concurso de acreedores, fórmula que pidió la semana pasada su junta general de accionistas ante la deuda de más de 13 millones que aún mantiene con la Junta y la UCO por préstamos participativos -de los que 8,1 son deuda vencida- y al no considerar viables ninguna de las opciones que se barajaban. Hoy está prevista la celebración por vía telemática de un consejo de administración que tendrá la última palabra después de volver a repasar, en un intento de agotar todas las posibilidades antes de adentrarse en el concurso, los escenarios que se le presentan a Rabanales 21 en función de que se decante por una medida u otra.

Los socios del parque habían estudiado una decena de escenarios con distintas combinaciones que incluyen capitalización de deuda, reestructuración de la misma y dación en pago con solares y edificios. Sin embargo, la Junta, que es la principal acreedora de Rabanales 21 a través de la Agencia Idea y del Soprea, considera que la mejor solución para garantizar el mantenimiento del parque es el concurso de acreedores y así lo propuso en la junta general de accionistas de la semana pasada, que lo aprobó por unanimidad. Las fuentes consultadas no prevén que el consejo de administración, en el que están representados todos los socios excepto Caixabank y Cajasur, tome una decisión distinta a la de la junta general de accionistas por la responsabilidad en la que incurrirían los consejeros, por lo que lo más probable es que se produzca la declaración del concurso.

LOS ESCENARIOS / Los socios de Rabanales 21 habían barajado siete escenarios, de los que cinco tienen un denominador común, la dación en pago con solares por valor de 4,9 millones a todos los acreedores (4,1 para Idea, 345.535 euros para el Soprea y 390.259 para la UCO). En el primero, la dación se combinaría con la capitalización de 8,2 millones; en el segundo, con la reestructuración de deuda, es decir, su aplazamiento desde el 2025 al 2035, y en el tercero, con la capitalización de 4 millones y la reestructuración de 4,1 entre el 2025 y el 2029. Después había otras dos propuestas más que combinan esa dación en pago por 4,9 millones con más entregas de solares y aplazamientos de deuda con cantidades que varían en función de una u otra y con las que el horizonte de pago sería el 2030 o 2033. Había otras dos opciones más, la de reestructuración de la totalidad de la deuda, es decir de los 13,1 millones desde el 2025 al 2036, y la dación en pago con solares por toda pero haciendo la media de dos tasaciones. La dación en pago a la Junta con terrenos estaba contemplada en el plan de viabilidad del 2017 por 4 millones. Rabanales 21 pidió una tasación que fijó el valor de los solares ofrecidos a la Junta en 4,1 millones, pero la Agencia Idea solicitó otra que los rebaja a 3,1 millones, de ahí la propuesta de realizar la media.

Además de estos siete escenarios, los socios, para saldar deuda vencida, analizaron entregar como dación en pago el edificio Aldebarán y realizar aplazamientos, o bien, aportar los inmuebles Orión y Centauro, junto con algunas parcelas y con reestructuración. Sin embargo, en estas dos opciones los flujos de caja previstos en los próximos tres o cuatro años serían negativos. En cuanto a las siete opciones anteriores, en ellas el flujo de caja iría de 874.000 euros a 7,1 millones del 2025 al 2031 y estaría en una horquilla que va de los 7,6 millones a los 18,8 del 2032 al 2037 en función del escenario, y sería menor si se entregan todos los solares. Las cifras, condicionadas en la mayoría de los casos a la venta de terrenos, empeoran si se usa la tasación realizada por Idea.

Aunque la capitalización de deuda se perfilaba como la alternativa más viable, la Junta considera que no lo es y que sería otra forma de aplazar la solución definitiva e inmediata que necesita Rabanales 21.