Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) informó ayer de que el aeropuerto de Córdoba ha «recuperado la normalidad» tras incorporar a un segundo bombero que ha sido trasladado esta vez desde Granada.

Se solventa así, de momento, la situación crítica surgida en el aeródromo cordobés este fin de semana, después de que el viernes tuviera que cerrarse durante 24 horas al darse de baja por ansiedad los cuatro bomberos de plantilla, hasta que se reabrió el sábado a mediodía, cuando fue posible contar con un bombero del aeropuerto de Jerez.

La necesidad de contar con personal especializado (cualquier bombero no está capacitado para trabajar en un aeropuerto) ha obligado a AENA a realizar estos traslados, que continuarán en los próximos días hasta tener de nuevo cuatro personas y que sea posible establecer los turnos de descanso necesarios. Según las fuentes consultadas, esta es la primera vez que se cierra el aeropuerto de Córdoba, en el que operan vuelos privados, deportivos y sanitarios (061 y trasplantes).