El Gobierno de la Junta confirma que no apoyará una tasa turística

El Gobierno de la Junta de Andalucía dijo ayer «no» a la tasa turística. La delegada provincial de Turismo, Purificación Joyero (Ciudadanos), que la semana pasada, en pleno debate sobre esta cuestión, eludió manifestarse a favor o en contra de la implantación de una tasa turística en la ciudad, confirmó ayer el rechazo del Gobierno a esta medida. Y lo hizo en las jornadas sobre turismo sostenible organizadas por el Instituto Municipal de Turismo, donde su presidente, Pedro García, volvió a insistir en la idoneidad de un impuesto de estas características «de carácter finalista, como contribución a la gestión del patrimonio». La postura de Joyero no sorprendió, ya que tanto PP como Ciudadanos han mostrado en el Ayuntamiento y en el Parlamento, durante la legislatura pasada, su negativa a asumir una medida. Para Joyero, que expresó su rechazo a la medida «sin intención de pormenorizar en la materia», aclaró, «cualquier tasa supone restar al turismo y a la competitividad». Para la Junta «no la apoyará porque de lo que se trata es de mejorar la competitividad del destino».

Tras la presentación a cargo de las autoridades, entre ellas, el vicerrector de Innovación de la UCO, Enrique Quesada, tomó la palabra la ex directora general de Turismo de la Junta, Susana Ibáñez, que ofreció una panorámica sobre el contexto del turismo internacional y coincidió con Pedro García en la importancia de garantizar unas condiciones laborales dignas a los trabajadores del sector como base para un turismo sostenible y de calidad. Ibáñez informó de que Andalucía, al igual que Europa ha alcanzado dos años antes los objetivos previstos para el 2020 en cuanto a recepción de turistas (más de 30 millones), ingresos (21.500 millones de euros) y volumen de empleo (más de 400.000 ocupados). Sin embargo, «seguimos creciendo en empleo, pero no en empleo de calidad, por lo que urge hacer cambios», apostilló.

Al cierre de la jornada, el director general de Turismo del Ayuntamiento, Jesús Ligero, destacó que buena parte de los ponentes participantes pusieran el acento en la necesidad de apostar por la calidad del destino a través de la formación de los profesionales del turismo y la recuperación de los recursos locales y en que «hay que poner precio a los servicios y apostar por precios públicos que se reinviertan en conservar y poner en valor los recursos locales». ¿No es esa una forma de definir la tasa turística?