Los promotores del campo de golf del tipo pitch and putt de Casilla del Aire, la empresa Deporte, Turismo y Cultura, han solicitado ya licencia en la Gerencia de Urbanismo tras modificar el proyecto en el que llevan trabajando desde hace cinco años. Urbanismo cuenta desde el día 9 de octubre con el proyecto definitivo, que adapta la iniciativa a la sentencia del TSJA de hace casi un año, que confirmaba que no podría tener pistas de tenis ni de pádel y añadía que tampoco era posible la casa club tal y como estaba prevista, con un sótano de 750 metros cuadrados. Otra novedad que presenta el documento entregado en el organismo municipal es que unifica en solo una fase el proyecto que se iba a llevar a cabo en dos, de forma que se hará de una vez, por lo que el campo de pitch and putt contará desde el principio con la casa club y con todas sus instalaciones.

Las previsiones de la empresa son que la licencia de obra tarde entre tres y seis meses, ya que, según estima, no debería tener más problemas porque el proyecto de actuación adaptado a la sentencia cuenta con el visto bueno de Urbanismo desde julio pasado. Una vez logrado el permiso de obra, el plazo de ejecución de la iniciativa será de algo más de un año. El presupuesto barajado asciende a 1,6 millones, según explica uno de sus socios, Alfonso Moreno, que asegura que ya hay operadores interesados.

Este campo situado junto al canal del Guadalmellato, y cerca de Miralbaida y de los planes parciales Huerta de Santa Isabel Oeste (sin urbanizar) y Este (urbanizado y con bloques en obras), tendrá nueve hoyos y será construido en una finca de 15 hectáreas, de las que ocupará 7, aunque puede utilizar 3 más en un futuro, ya que está prevista su ampliación con otros nueve hoyos. Además, hay 5 hectáreas reservadas. El campo de pitch and putt tendrá putting green y chipping green (zonas de prácticas). Las instalaciones dispondrán de un campo de prácticas de 240 por 90 metros, que será «uno de los de mayor tamaño de Andalucía», según indica el autor del proyecto, el arquitecto Rafael Castelló. La casa club contará con piscina y con un espacio con terrazas. A todo esto se suma un aparcamiento con capacidad para un centenar de vehículos ampliable también en un futuro. Todo se hará, según Castelló, con «elementos que respeten el entorno». Además, añade, solo una mínima parte necesita riego.

El arquitecto Rafael Castelló explica que la casa club, «por el entorno en el que está, debe tener un lenguaje arquitectónico tradicional» que combinará con «elementos modernos como grandes ventanales». El edificio se estructurará en torno a un patio central, «propio de la arquitectura cordobesa, pero muy abierto al exterior», señala. La casa tendrá una zona de recepción, caddie master, tiendas dedicadas al golf, cocina, restaurante y salas de uso múltiple.

TRAYECTORIA / Llegar hasta aquí no ha sido fácil. Aunque el Pleno aprobó en el 2014 el proyecto de actuación presentado por Deporte, Turismo y Cultura un año antes, el acuerdo fue recurrido por la Junta en lo relativo a la casa club, las pistas de tenis y pádel y la piscina. En el 2015 hubo una primera sentencia que permitía el campo de golf, la piscina y la casa pero no las pistas, que fue recurrida por la Junta. Después, en noviembre del 2017, cuando el proyecto estaba a la espera de licencia, el TSJA se mostró en contra de las pistas y de la casa club por exceder en 750 metros la edificabilidad permitida. El TSJA aclaró después que la casa club es posible pero no su sótano y la Junta dijo que no recurriría. Tras ello, la empresa siguió adelante con el proyecto, que, de momento, será el único en Córdoba, ya que el Parador de la Arruzafa no ha ejecutado el suyo, que tiene licencia desde el año pasado.