Los ladrones de joyas han vuelto a elegir Córdoba para desvalijar un establecimiento en el centro de la ciudad después de que el 17 de julio obtuvieran un buen botín en la joyería Alfaros. En la madrugada del miércoles le tocó el turno a la Relojería Suiza, situada en la calle Claudio Marcelo, donde practicaron un butrón en la pared colindante a las instalaciones de los almacenes C&A, abandonados desde hace años, para entrar en el local y llevarse piezas de plata, oro y relojes de marca, "todo seleccionado", según comentó a este diario Rafael Velasco, uno de los propietarios de este veterano establecimiento. Además, reventaron una caja fuerte.

La alarma saltó sobre la 1.30 horas y los ladrones emplearon dos sombrillas de playa --que dejaron en una esquina junto a un destornillador de grandes dimensiones y una palanca-- para amortiguar el efecto de los sensores instalados en ese comercio. "Actuaron muy rápido", ha comentado Velasco, quien cree que "habrán entrado varias veces en el C&A porque el agujero está hecho en el sitio exacto; no se han equivocado y han ido a tiro fijo".

El butrón lo practicaron en la trastienda y rompieron los ladrillos más cercanos al suelo. En esa estancia, de unos ocho metros cuadrados, se encuentra la caja fuerte que forzaron. Ayer se veían en la pared las marcas gráficas de la Policía Nacional, que se ha hecho cargo de la investigación.

ENTRADA Una de las hipótesis que se barajan es que los ladrones entraran a los antiguos almacenes a través de una puerta metálica que da a la calle Duque de Hornachuelos --justo a la espalda de la joyería-- y que ayer presentaba una cerradura hundida, según pudo comprobar este diario.

Las estanterías y expositores de la Relojería Suiza quedaron en buena parte vacíos de cadenas, anillos, pulseras, pendientes y otras piezas de pequeño tamaño, principalmente de de oro y plata, fáciles de transportar en bolsas o mochilas, mientras que han dejado los objetos de mayor volumen, como marcos de plata y alpaca, copas, etcétera.

"Es muy desagradable que se lleven en una noche todo lo tuyo", señala este joyero, quien reconoce que el material robado supone "una cantidad elevada" que no quiso facilitar.

Es la primera vez que este comercio es objeto de un robo y Velasco alerta de que "tengan cuidado los demás joyeros, sobre todo los pequeños" por el segundo desvalijamiento de un establecimiento cordobés este verano.

La Relojería Suiza está regentada por los hermanos Velasco desde los años 80, quienes la adquirieron a la familia Piaget, que fundó esta firma en 1866, establecida entonces en la plaza de las Tendillas.