Antonio Serrano Gómez es desde ayer nuevo jefe de la Policía Local de Córdoba, puesto que ya desempeñó hasta abril del 2008. El 14 de abril de aquel año, el conocido como caso Torreblanca se cobró su primera víctima: el jefe de la Policía Local, Antonio Serrano, quien presentó su dimisión por "ética y responsabilidad", y para no interferir en la investigación de la Fiscalía sobre las supuestas irregularidades urbanísticas.

El Consistorio cordobés informó a través de un escueto comunicado de prensa que Serrano regresaba a su cargo "después de estar ejecutando otras funciones en el Ayuntamiento en este tiempo" y que "a partir de hoy (por ayer) retoma su tarea en la Jefatura de la Policía Local". El regreso de Antonio Serrano supuso asimismo el cese del hasta ahora jefe de los locales, Rafael Foche Moreno.

El Ayuntamiento, por medio del comunicado, expresó su agradecimiento a Foche por la labor y el trabajo desempeñado durante todo este tiempo al frente del cuerpo de la Policía Local.