Una funcionaria de la Jefatura Provincial de Tráfico de Córdoba ha sido detenida junto a otras doce personas, dos de ellas de Pozoblanco y Villaralto, en una operación efectuada por la Guardia Civil de Ciudad Real en relación con la venta de exámenes teóricos de permisos de conducir y los presuntos delitos de cohecho, falsificación, intrusismo profesional y encubrimiento.

La investigación, que ha estado dirigida por el juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Almadén (Ciudad Real), se inició después de que un particular alertara de que algunas personas con escasa formación cultural podían estar obteniendo el permiso de conducir de forma ilícita. Las pesquisas determinaron que el núcleo de la trama se encontraba en una autoescuela de Chillón (Ciudad Real). El titular de este centro, valiéndose de la fama que le acompañaba sobre su alto porcentaje de aprobados en el examen teórico de conducir, captaba a personas sin apenas estudios que tenían dificultad para aprobar el examen para la obtención de carnet de conducir y les garantizaba que lo superarían a cambio de la entrega de una determinada cantidad de dinero.

Además de esta condición, los aspirantes debían desplazarse a Pozoblanco. Una vez allí, "visualizaban el examen y entregaban el test de respuestas, exámenes que posteriormente eran manipulados para conseguir superar el test técnico". Para ello, el titular de la autoescuela contaba con la colaboración de una funcionaria de la Jefatura Provincial de Tráfico de Córdoba, que era la encargada de manipular los resultados de la prueba, según la Guardia Civil.

Pero la trama iba más allá. Para dificultar una posible investigación, a los alumnos implicados se les exigía, como medio de pago, que comprasen un vehículo usado en un concesionario de la localidad de Pozoblanco, cuyo precio estaba sobrevalorado, incluyéndose en el mismo tanto el valor real del vehículo como la comisión exigida por los integrantes de la trama.

Además del propietario de la autoescuela y la funcionaria, la Guardia Civil comprobó que en los supuestos hechos delictivos participaban personas residentes en distintas localidades de la comarca de Almadén (Ciudad Real), así como en otras cercanas de Córdoba y Badajoz. Igualmente, en el marco de la investigación se descubrió que dos personas ejercían labores de enseñanza en el centro implicado sin poseer la titulación correspondiente, por lo que también se les imputó a ambos un delito de intrusismo profesional.

En los registros efectuados en la operación se han obtenido los expedientes de alumnos que desde el 2007 han obtenido el permiso de conducir en la autoescuela investigada, continuándose las gestiones para determinar su legalidad. Según fuentes consultadas, la funcionaria de Tráfico, con un cargo superior entre los examinadores, está suspendida de empleo y sueldo.