Con motivo del Día Internacional por la Eliminación de la Discriminación Racial, el Ayuntamiento de Córdoba y la ONG Córdoba Acoge organizaron ayer sendos actos para promover entre la sociedad la solidaridad y la tolerancia.

La primera de estas actividades se desarrolló en el bulevar Escultor Fernández Márquez y consistió en un pasacalles, varios talleres y juegos y la representación teatral El baúl del pirata , que estuvo a cargo de la Compañía del Medio Real. Hortensia Navarro, jefa del departamento municipal de Educación e Infancia, comentó que esta sesión se enmarca en el programa A jugar... ¡a la calle! , y tiene como objetivo "apropiarse del espacio público y transmitir determinados valores que coinciden con algún evento, en este caso la celebración del día internacional".

Niños y padres de la zona se acercaron al bulevar para participar en el taller de marionetas de dedos, construcción de malabares con globos y juegos en bicicleta, además de asistir al pasacalles Los zíngaros llegan al barrio y a la obra de teatro.

El otro escenario estuvo a las puertas de la iglesia de San Nicolás de la Villa, donde Córdoba Acoge montó una degustación de platos típicos de varios países elaborados por los propios inmigrantes. A la gastronomía se unió la música, interpretando dos violinistas y una teclista diversas piezas clásicas. La ONG repartió un comunicado en el que se reflejaba que "con este acto participamos del dolor de los nuestros y queremos dar ejemplo de unidad y tolerancia" y que "frente al horror del fanatismo, debemos mostrar la más fuerte de nuestras repulsas".