Ana M Toribio estudia primero de Ingeniería Aeronáutica en Sevilla y ha sido la chica con mejor puntuación en las pruebas del Ministerio

Obtuvo la segunda mejor puntuación en las pruebas de Selectividad del año pasado, un 9,792 como nota de acceso, un 13,152 sumando las específicas y Matrícula de Honor en Bachillerato, que cursó en el instituto López Neyra. Un expediente brillante que ayer recibió un nuevo reconocimiento de manos del ministro de Educación, José Ignacio Wert, que hizo entrega de los Premios Nacionales de Bachillerato del curso 2011/2012 en el salón de actos de la Biblioteca Nacional, en Madrid. Una cordobesa, Ana María Toribio Moreno, ha conseguido este año destacar en los primeros puestos (el tercer puesto, empatada en puntos con otro estudiante) y situarse como la mejor de las cinco chicas seleccionadas entre los 15 galardonados por el Ministerio, que cada año realiza unas pruebas para premiar la excelencia en el Bachillerato.

Dotado con 1.200 euros, Ana María ya tiene pensado en qué quiere dedicar parte del dinero del premio. "Me gustaría hacer algún viajecillo con mis amigos y guardar el resto para pagar algo del máster que tendré que hacer cuando acabe la carrera porque desde que empezaron los grados es casi obligado estudiar un máster".

De momento, está en Sevilla, estudiando Ingeniería Aeronáutica y según cuenta, le va bastante bien. "He notado el salto a la universidad, el nivel de conocimientos que se exige es bastante más alto y hay menos convocatorias de exámenes, por lo que tienes que esforzarte más para conseguir los resultados", explica, "pero en general, creo que me estoy adaptando bien". La dificultad de la carrera que ha elegido no le asusta. Al contrario, supone un reto que, según su madre, Ana Moreno, ha acabado por confirmar la vocación que tiene por la aeronáutica. "Está convencida de que está haciendo lo que le gusta y eso es lo importante", destacó su progenitora.

A sus 19 años, su sueño es llegar a trabajar algún día en la NASA y nadie duda de que, si se empeña, puede conseguirlo. El director del IES López Neyra, Manuel Vega, se mostraba ayer encantado de que una alumna tan brillante haya cursado estudios en sus aulas. "Ana tiene un talento y una valía impresionante, se merece el premio, que además supone un orgullo para todos los docentes que trabajamos en el centro", aseguró.

La madre de Ana María Toribio, profesora de instituto durante muchos años, insistía ayer en agradecer el premio a los docentes del López Neyra y en especial a su exdirectora, Margarita Cota, "que también le dio clases", y a Rodrigo Checa, director del Conservatorio Profesional de Música y profesor de flauta travesera de su hija dentro del Bachillerato Experimental que en este centro permite simultanear la Educación Secundaria Obligatoria y el Bachillerato con el grado medio de Música. "Como docente, he visto crecer a mi hija en sus estudios y en eso sus profesores también tienen mucho que ver", señaló.