La vida le ha cambiado en el Córdoba CF, donde ha encontrado el escenario ideal para relanzar una carrera futbolística que había sufrido un duro golpe en su último destino, el Marbella, con el que padeció la amargura del descenso. Sus ganas de volver a primer plano coinciden con las de su actual club, un Córdoba que está dando los primeros pasos de un renacimiento. Alejandro Bernal Carreras (Sevilla, 1991) es uno de los referentes en el equipo de Germán Crespo, quien ha depositado en él la confianza como eje en el centro del campo. Su experiencia, versatilidad y visión de juego están siendo factores clave en una temporada para el recuerdo. Pero, para él, el auténtico motor ha estado en la fortaleza como grupo y en la unión entre "jugadores, directiva y afición" para buscar un mismo objetivo.

-El ascenso está a la vuelta de la esquina y con total merecimiento.

-Pues sí. Los números que hemos hecho son de equipo que va primero y que merece ir donde estamos. Es verdad que todavía quedan varios partidos y lo que queremos es conseguir todos los récords posibles de aquí al final.

-Faltan 18 puntos por jugar con una renta de 12 y el golaverage sobre el Cacereño, la verdad es que parece prácticamente imposible que se pueda escapar.

-Es verdad que tenemos que hacer las cosas bastante mal para no lograrlo a estas alturas del campeonato. Todos nosotros venimos trabajando bien y queremos conseguir lo antes posible porque es el principal objetivo. Pero lo que comento, todavía hay varios partidos complicados y queremos hacerlo lo mejor posible para obtener los puntos.

-Sí hay que resaltar que los extremeños no están poniendo las cosas sencillas para ello, posiblemente sean los dos mejores equipos de esta Segunda RFEF.

-Antes del partido del pasado domingo me reuní con José Ramón y Carlos Fernández, dos amigos míos de anteriores etapas que ahora juegan en el Cacereño. Precisamente comentábamos esa situación, que íbamos mirando lo que el otro hacía y no nos cansábamos de ganar. Somos los dos equipos que estamos ahí peleando por el liderato, pero nuestra regularidad viene desde principio de la temporada y eso nos hace estar por encima de ellos.

-¿Cómo se gestionan estos momentos donde uno quiere sellar ya el objetivo y todavía queda un paso por dar?

-Como todos los días, en realidad. Seguimos haciendo las mismas cosas, planificando los partidos dependiendo del rival que tenemos y haciendo las cosas como sabemos. Eso sí, es verdad que se nota en el ambiente que el ascenso cada vez se acerca más y cuando llegue, llegará.

-Este domingo puede producirse, aunque para ello deben ganar al Villanovense y, además, que el Cacereño pierda en Montijo.

-Lo bonito, como es lógico, sería en casa, pero lo que nos marcamos ahora es el récord de ganar todos los partidos como locales. El Villanovense será un rival complicado, son los únicos que nos han ganado en el curso y sabemos de su fortaleza. En cualquier caso vamos a intentar llevarnos el partido con nuestras cualidades.

"Lo bonito, como es lógico, sería en casa, pero lo que nos marcamos ahora es el récord de ganar todos los partidos como locales"

-Se prepara una gran fiesta en El Arcángel con nuevas promociones de entradas pese a no poder celebrar el ascenso tras el partido. El apoyo de la grada ha resultado vital y no solo en casa.

-Tenemos mucho ganado, pero es que hemos estado arropados en todos los partidos. La afición siempre estuvo con nosotros y tuvo nuestro mismo objetivo. Ha sido una unión que ha arrollado a todo el mundo, la unión con nuestra gente, la directiva, los jugadores... Todos al final queremos lo mismo y se demuestra día a día. Este sábado a lo mejor vendrá más gente y disfrutaremos de otro día más en El Arcángel.

-¿Ha notado cierta impaciencia o ansiedad en algunos sectores?

-Inconscientemente, y cuando ves las redes sociales, sí es cierto que la gente habla del ascenso, es normal. También se escuchaba del Recreativo de Huelva y ya lo lograron. Lo tienes tan cerca que se habla y se tiene presente siempre. Nosotros, mientras tanto, seguimos planificando la semana igual y solo estamos pendientes de ganar el sábado.

-Tal vez el único instante más complejo fue tras la alineación indebida de Javi Flores contra el San Fernando, pero el grupo supo levantarse.

-Sí, ese partido salió como perdido en los despachos pero ganamos 0-3 en un campo complicado. Aunque el San Fernando esté abajo, son fuertes en casa y la dinámica de los partidos ha sido la misma. Los equipos nos defienden bastante bien, en El Arcángel nos está costando porque vienen a conseguir un punto, algo que nadie ha hecho. Además, es que todos los necesitan, ya sea por arriba o por abajo. El grupo sigue intentando jugar igual, proponiendo y teniendo ocasiones. Al principio marcábamos más y ahora cuesta más que entren, pero seguimos generando de cara a la portería rival.

Álex Bernal ante un escudo del Córdoba CF en el interior de El Arcángel. Manuel Murillo

-¿Se está haciendo un poco larga la temporada?

-Sí, son muchos partidos ya, pero nos vinieron bien. Tenemos una plantilla muy competitiva donde cualquier compañero lo hace bien y todo el mundo tuvo minutos. Juegue quien juegue puede demostrar que al equipo le siguen saliendo las cosas.

-Las Tendillas. ¿Le ha hablado algún compañero como Javi Flores o Bernardo Cruz sobre ese momento de celebración en la plaza?

-Me lo he imaginado varias veces, si soy sincero. En el vestuario se hacen cábalas sobre si ascenderíamos aquí o fuera. Entonces ya piensas que si lo haces fuera, llegas y te está esperando la gente para estar todos juntos. Si es en El Arcángel, nos vamos todos a Las Tendillas, que esté blanquiverde y súper colorida, con mucha gente que querrá el ascenso del Córdoba.

"Me lo he imaginado varias veces, si soy sincero. En el vestuario se hacen cábalas sobre si ascenderíamos aquí o fuera. Entonces ya piensas que si lo haces fuera, llegas y te está esperando la gente"

-Una ligera idea se pudo hacer en la Copa RFEF con el título cosechado ante el Guijuelo.

-Fue un día histórico, precioso para nosotros. Lo disfruté al máximo y eso que no podía jugar porque todavía estaba con la lesión. Lo hice como si fuera un cordobés y cordobesista más. Estaba deseando que acabara el partido para celebrarlo con la afición.

-Usted no consiguió ningún ascenso todavía. ¿Cómo se lo imagina?

-Cuando estuve en el Huesca acabé saliendo en el periodo navideño a La Hoya Lorca. Ellos acabaron subiendo y no logré celebrarlo con ellos. Tenía amigos en el equipo y relación de las dos temporadas que estuve allí, pero me quedé cerca. Y un ascenso me lo imagino como una celebración a lo grande con toda la gente que quiso lo mismo desde el principio de temporada. La unión que se ha creado con la afición es increíble, al final de cada encuentro siempre estamos celebrando y cantando. En un ascenso, pues imagínate a todos juntos cantando mil canciones.

-Hace mención al Huesca pero también peleó en el play off con el Leganés y el Marbella. ¿Qué cree que faltó en aquellas ocasiones?

-He jugado varios pero sin conseguir el ascenso. Este año, si Dios quiere, me lo quitaré de encima y será de forma directa. En las eliminatorias es complicado y todo pasa por momentos de partido. En Leganés, por ejemplo, fue duro el enfrentamiento con el Lleida. Nos terminaron metiendo el gol en el último minuto cuando parecía que nos íbamos a la prórroga. Y en Marbella tuvimos un par de intentos. Allí también se pasó mal porque, en esos momentos puntuales, tienes una falta de concentración o una duda y el otro equipo lo aprovecha. Allí caímos una vez en los penaltis y la más reciente con la Peña Deportiva. Los equipos están ahí porque hacen las cosas bien y compiten para acabar subiendo.

-¿Qué se aprende de un revés deportivo así?

-La verdad, que el que la sigue, la consigue. Siempre peleas por ganar la liga o estar lo más arriba posible. Un futbolista lo que quiere es ganar y estar arriba y, cuando pierdes, no te queda otra que seguir intentándolo. Una vez que te caes, te levantas y a seguir peleando por los objetivos que te marques.

-La situación en el Marbella fue especialmente dolorosa, sobre todo con el descenso de categoría contra todo pronóstico.

-Sí, estuve cuatro temporadas muy cómodo allí, hice dos play offs y quería lograr el ascenso porque se estaban haciendo las cosas bien. Al final descendimos y te vas embajonado porque no es lo que quieres. Se dio una mala temporada y empeoramos el objetivo. Te marchas con esa espinita, desde luego. Llegué al Córdoba, que pensaba que después del Marbella me iba a ser difícil encontrar un sitio en el que estar igual de bien y ha sido como si siguiera allí o incluso mejor. He empezado jugando, algo que no conseguí la temporada pasada, y cuento con la confianza de Germán Crespo. Se ha dado todo de cara en un sitio perfecto para conseguir lo que todos queremos.

-¿Tiene el Córdoba CF lo necesario para seguir progresando en el fútbol nacional?

-Por supuesto. La gente que hay aquí desea que su equipo esté en la liga profesional. La directiva está trabajando súper bien. El cuerpo técnico es muy profesional y trabajador y este año se va a terminar, si Dios quiere, bien también. Ahora se están renovando jugadores, se quiere continuar con la misma base y se apuntalará, porque habrá que hacerlo, para la categoría que viene.

-La combinación de veteranía y juventud también ha dado resultados. Javi Flores y usted aportan ese temple en la línea de medios mientras Simo, Fuentes o Luismi generan por bandas.

-Siempre que hablo de los centrocampistas lo hago porque los veo a diario y sé de la calidad que tienen. Javi y yo somos los que jugamos últimamente, pero Toni Arranz, Julio Iglesias y Viedma demostraron también. Cualquiera lo ha hecho bastante bien y se merecería estar, pero somos muchos en esa posición y el míster ha apostado por nosotros.

"Yo, cuando era más joven, lo que quería era jugar. Te creías muchas veces que eras Maradona, que llegarías al primer equipo"

-Salió de la cantera del Real Betis y desde entonces ha tenido una larga carrera y multitud de vivencias. ¿Antes de empezar contemplaba tener un recorrido parecido?

-Yo, cuando era más joven, lo que quería era jugar. Te creías muchas veces que eras Maradona, que llegarías al primer equipo. Si es cierto que conforme pasan los años y te acercas al Betis B, te das cuenta de lo difícil que es llegar. Al final las oportunidades aparecen para pocos futbolistas y tienen que estar a la altura. En cualquier caso, la verdad es que estoy contento con la trayectoria que he tenido y espero que dure muchos años más.

Álex Bernal, en el gimnasio de El Arcángel. Manuel Murillo

-Es uno de los jugadores que renovó su compromiso con el Córdoba CF y estará en la Primera RFEF. ¿Qué espera de esa categoría y que le está pareciendo la Segunda RFEF?

-Conozco a muchos de los equipos que están en la Primera RFEF, tengo compañeros y amigos y sé del nivel que hay. También de esta Segunda RFEF y, como es el primer año y se hizo rápido, sí hay diferencia entre ambas pero tampoco mucha. Los clubs, como el Córdoba, está claro que no son de esta división y lo demostramos. Algunos han caído aquí porque el año pasado se hizo la liga como se hizo. Cuando pasen dos o tres años sí habrá una diferencia más notoria entre la Primera y la Segunda.

-¿Considera que el equipo estaría preparado para competir por subir a Segunda División el año que viene?

-Con los compañeros que tengo, entreno y juego sé de su calidad y del trabajo que hay detrás. Apostaría por los mismos, pero si se asciende a una categoría superior debe reforzarse la plantilla, eso está claro. Y si se asciende a la siguiente más alta, también, eso es lógico y normal. Lo que no lo sería es permanecer con el mismo equipo. Al final pasan los años, hay lesiones, sanciones, la edad y muchos factores que te obligan a hacer cambios sí o sí y firmar a jugadores de categoría superior. Eso sí, manteniendo una base bastante grande porque ha dado rendimiento y el vestuario está demostrando que es muy sano y bueno. Eso hace fuerza en cualquier categoría.

-¿Qué supuso firmar por el Córdoba y cómo afronta su futuro en la entidad?

-Cuando sonó para poder venir paré a todos los demás equipos. Quería venir aquí, se me hizo larga la espera pero fue satisfactoria. Era lo que yo quería y me encantaría seguir porque me encuentro súper cómodo con mi familia, estamos cerca de Sevilla y me ha acogido muy bien el vestuario. Además ya conocía a la directiva y a la afición que tiene. Es un club grande que tiene su historia y que seguro que en poco tiempo estará de nuevo en la liga profesional.