El Córdoba CF celebró ayer martes su antepenúltima sesión de entrenamiento antes de tomar las definitivas vacaciones y tras el descenso a Segunda RFEF, producido el pasado 9 de mayo. La sesión, celebrada en un buen ambiente como viene siendo habitual en los últimos días, contó con la presencia del consejero delegado de la entidad blanquiverde, Javier González Calvo, y del director deportivo, Juan Gutiérrez Juanito.

Tras algo más de hora y media de trabajo, la plantilla del Córdoba CF dio por finalizada la sesión, antepenúltima de la temporada, y con la nómina de abril regularizada desde este lunes tras un retraso de tres semanas. Ahora solo quedan las sesiones de hoy y de mañana jueves, tras las que vendrán las vacaciones y el cierre definitivo de la temporada. La actividad en los despachos del Córdoba CF se iniciará justo en ese momento.

En lo estrictamente deportivo, la única novedad la volvió a protagonizar Samu Delgado, de nuevo ausente del terreno de juego de la Ciudad Deportiva. El extremo ha ido intercalando sesiones sobre el césped y tratamiento fisioterápico en El Arcángel en las dos últimas semanas, clara muestra de que se está llevando su dolencia con el máximo cuidado después del susto que protagonizó hace unas semanas, precisamente en un entrenamiento de la plantilla blanquiverde en Camino de Carbonell.

Djak Traoré, en el centro de un rondo durante la sesión de ayer del Córdoba CF en la Ciudad Deportiva. MANUEL MURILLO

Una vez que el plantel cordobesista tome las vacaciones está previsto que desde el mismo viernes se inicien los trabajos de migración de la variedad de césped en el campo uno, único disponible hasta ahora, ya que tanto el campo dos de la Ciudad Deportiva como el de El Arcángel se encuentran en proceso de migración. Este último podría estar disponible a finales de junio, mientras que el del estadio municipal se encontrará a disposición de los jugadores en ocho semanas y para mediados de julio, fecha prevista del regreso de la plantilla blanquiverde, estará en perfectas condiciones.

Por lo demás, a pesar de lo anómalo de la situación por seguir con los entrenamientos 16 días después de haber finalizado la competición, el ambiente en las sesiones del Córdoba CF, al menos en apariencia, es bueno. Sobre todo en esta semana, la última, cuando ya se vislumbra el jueves, último día de trabajo que da paso a unas vacaciones de al menos mes y medio y en el que el regreso de la plantilla blanquiverde será muy distinto al del pasado verano. Y durante ese mes y medio se esperan muchos movimientos en los despachos.