Llegó este verano al Córdoba CF como uno de los fichajes estelares por razones futbolísticas y sentimentales. A Bernardo Cruz (Córdoba, 1993) le acogió la afición con altas expectativas. Su imagen, ligada al ascenso a Primera y a una etapa de esplendor de la cantera, provocaba una punzada de ilusión en la hinchada. Las cosas, sin embargo, no han ido como esperaban tanto los seguidores blanquiverdes como el propio futbolista, que admite sentir "rabia y coraje" por la dura situación del club, abocado a una exigente segunda fase, y por no haber dado de sí el nivel que esperaba. 

-El Córdoba CF ha sido irregular y no se le ha visto nunca cómodo.

-No hemos tenido continuidad en rendimiento. Nos ha faltado, y creo que es básico en un equipo para estar en la zona alta, enganchar una dinámica de resultados positivos y cuando digo positivos quiero decir sumando de tres en tres. Nos ha faltado enganchar victorias seguidas a lo largo de la temporada. Y la temporada regular ya lo indica su nombre, regular, te coloca en tu sitio y donde mereces. Sabemos que es una categoría complicada, que son partidos cerrados, pero no hay excusas ni justificaciones. Nosotros somos el Córdoba CF y por nombre, por club y por entidad, el rendimiento de los jugadores no ha estado a la altura. Y hay que tomarlo con la naturalidad con la que se toma el fútbol, aunque probablemente haya muchas emociones y sentimientos alrededor de esto. Pero cuando uno está mal y no está al nivel que tiene que estar tiene que levantar la mano, dar un paso al frente y asumir con naturalidad y el dolor interno de reivindicación pues que no se ha estado a la altura.

-¿Ha sido más un problema mental, físico o de otra índole?

-Ambos forman parte del deporte. Para mí van de la mano. No es ninguna excusa que físicamente el equipo no esté o esté. En una semana un equipo no cambia tanto físicamente. El aspecto físico creo que no hay ningún tipo de excusa. Tenemos los mejores medios y profesionales para rendir al máximo nivel. ¿Qué pasa? Es cierto que cuando ves que los resultados no llegan, que no estás cómodo en el partido, que ves que el rival te está generando más que tú a él, ese aspecto mental y físico van de la mano. Y como somos humanos hay bloqueos y hay piernas que no van todo lo suficientemente frescas que deberían. ¿Por qué? Porque el aspecto emocional está dañado. Y es normal. En los equipos se tiene que trabajar, cada uno de manera individual, porque estamos en un deporte en el que cada vez es más importante saber gestionar emociones. Y más en proyectos así, un proyecto grande, tienes que soportar la presión, tienes que soportar el manejar un resultado a favor sabiendo que solo te vale eso. Si teníamos que pasar un proceso en el que el equipo tiene que saber adaptarse a ese tipo de emociones espero que lo hayamos aprendido para estos seis partidos que quedan. Saber gestionar esas emociones.

-¿Qué papel ha jugado la pandemia, y El Arcángel vacío, cuando otros rivales sí estaban acostumbrados a jugar sin público o con muy poco aforo?

-Sí, estoy de acuerdo con esa idea. No es excusa, ya te digo que no tenemos que buscar excusas, porque los culpables son los que salen al campo y los que rinden. Pero a nosotros nos ha afectado muchísimo el que no haya público. Es una baza que ha jugado en contra nuestra jugando en casa, porque nosotros lo notamos. Notamos el público, su empuje. Cuando nos exigen, cuando aprieta al rival, se vive un ambiente de fútbol, te sientes profesional, te sientes que por momentos te empujan. El otro día, contra el Betis Deportivo, tú sabes tienes el refuerzo de la grada, porque vas cero a cero y escuchas que la gente aplaude, que se lo pasa bien, a pesar de la dinámica tan mala de resultados. Notas que están contigo, que disfrutan, celebran las ocasiones y eso al jugador le refuerza. Entonces, ha habido partidos fríos en El Arcángel, da mucha pena. Suena el himno y dices ‘uf… madre mía'. Y ahora voy a jugar un partido oficial en El Arcángel’. Ya digo que no es excusa, pero es que te tienes que adaptar. Se lo he escuchado a muchos jugadores y entrenadores de élite cuando empezó el covid-19. Una de las cosas que dijeron es que quien mejor se adapte a esto más éxito va a tener. Y es verdad. Quien mejor se ha adaptado mejor a esos ambientes es el que ha ganado más partidos.

-Pero es llamativo que haya una plantilla veterana en su gran parte y que no haya habido ese control de emociones.

-Sí. Va ligado, como he dicho, a lo físico y mental. El control de las situaciones va ligado a los momentos y a las dinámicas. Y nos ha costado mucho enganchar una dinámica buena, de manera continuada, de resultados. Que incluso sientes antes del partido que es así, que eres un tren. Y todo el futbolista que ha vivido esa experiencia lo sabe. Notas que antes de saltar al campo, en el túnel ya vas ganando.

Bernardo Cruz, jugador del Córdoba CF, durante la entrevista en El Arcángel. Manuel Murillo

-¿Fue un golpe demasiado duro la victoria del Yeclano en El Arcángel? Llegó justo después de una gran racha del equipo.

-Lo he escuchado bastantes veces, lo del partido del Yeclano. El partido del Yeclano lo pierde el Córdoba CF, con todos mis respetos al Yeclano. Está clarísimo. Durante la semana, el míster, que tiene muchísima experiencia en el fútbol de élite, nos lo venía avisando: ‘El partido más difícil que tenemos hasta ahora’. Y mira, perdimos el partido nosotros. Si cometimos el error de perder aquel partido, no podemos cometer el error de quedarnos anclados. El partido se pierde y lo pasado, pasado está. No podemos cometer el error de ser torpes y quedarnos anclados. Para mí se pierde, se pierden tres puntos, pero si nos ponemos así también miraríamos otros partidos en los que nos hemos dejado puntos. Es doloroso de perder aquel partido pero tuvimos que ser lo suficientemente inteligentes como para zanjarlo. Te rompe una dinámica, pero debimos ser fuertes para enganchar otra dinámica de buenos resultados para coger otro impulso. Y por desgracia no hemos sido capaces, es la realidad.

"El partido se pierde y lo pasado, pasado está. No podemos cometer el error de ser torpes y quedarnos anclados"

-En el último partido, pese al resultado y la decepción, se jugó bastante bien, el mejor fútbol de la temporada.

-Estoy de acuerdo contigo.

-Parece que duele más la derrota en sí, por la forma, que la no clasificación para la pelea por el ascenso, porque si se gana el equipo hubiera pasado a la segunda fase con 30 puntos.

-En el aspecto emocional el dolor está. Porque a quien no le duela perder, y más de esa manera, que se replantee la profesión que tiene. Pero lo que duele es el puntaje. Si tú ganas y sube el Sevilla Atlético, le tienes el golaverage al Betis y de esta manera te tiene ganado el Sevilla cuatro puntos. Es lo que hace que todo sea más cruel. Porque el final lo pierdes de una manera que… Hasta el miércoles no soy consciente, pasas el duelo el lunes y el martes. Llegas a casa, la familia te cuenta el cóctel de emociones que vivió, los aficionados por la calle también. Y hasta el miércoles, al menos yo he ido limando y digiriendo lo que ha ocurrido. Es el símil de estar en el ring y te viene un puñetazo y te noquea. Y no supimos leer el partido. Es como cuando un boxeador se queda grogui. Hay que aceptarlo, hacer autocrítica, saber leer los partidos, pero también somos humanos. Me gusta hacer autocrítica de forma individual y colectiva y de los errores que cometamos que no volvamos a cometerlos. Que las cosas nos marquen pero para bien. Muchísimos personajes históricos antes de triunfar -políticos, escritores, jugadores de la NBA, fútbolistas- todos tienen un patrón: que antes de llegar a donde han llegado les han dicho que no valen y los han apartado. Pero han tenido esa determinación para dar la vuelta a esa situación negativa que han vivido. Sueño en estos seis partidos con ser ese tipo de personaje histórico o de figura histórica y que todo lo negativo que nos ha pasado en esta primera fase lo convirtamos en positivo en la segunda. Si hay algo bueno en este vestuario es la implicación y el compromiso que hay. De verdad, no es de cara a la galería. Hay un clima de compromiso y de implicación por esto… Es una pena que los resultados no lleguen, pero el verde es lo que te da y te quita.

-¿Está de acuerdo con lo manifestado por el club de que la temporada es un fracaso y que hay que evitar la hecatombe?

-Totalmente. La temporada hasta ahora es suspensa, de fracaso, porque no cumples el mínimo exigido y ahora luchas por ese mínimo exigido. Si no llegas a eso, es una hecatombe.

-¿Y cómo se transforma eso negativo en positivo, como decía antes, para llegar al mínimo exigido?

-Intentar ser fríos y objetivos. Y analizar las cosas, que han sido muchas, que han estado bien. El club transmitiendo la tranquilidad y la disponibilidad que ha tenido hacia nosotros, en eso estamos muy agradecidos. Y en lo futbolístico ser inteligentes y objetivos para intentar salirnos de la primera persona, de ser jugadores del Córdoba CF. Vernos desde fuera y ver las cosas que hemos hecho bien: han sido seis porterías a cero consecutivas, la segunda mejor marca de imbatibilidad en el Córdoba CF, que se ha desplegado un muy buen fútbol de ataque. Que por circunstancias, por dinámicas individuales que afectan al colectivo, pues que seamos lo suficientemente inteligentes para tomar conciencia de esas cosas que hemos hecho bien. Es que es un mes y medio. Es que si una persona no se motiva en que en solo un mes y medio pasa de vivir un fracaso a poder solventarlo, si no tienes reivindicación contigo mismo… Esos seis partidos tenemos que tomarlos como una reivindicación individual para que el equipo se vea beneficiado.

-¿Qué opinión te merece Pablo Alfaro, que en los últimos días ha estado en la picota?

-Yo le veo una persona muy equilibrada. Entrenador y persona son parecidos en el día a día. Es muy profesional, no deja detalles sin trabajar, lo que te da confianza en el campo. Trabajamos muy bien durante la semana el plan del rival, cómo hacer daño, cómo te van a defender, etcétera. Pero es muy equilibrado. Estará dolido, con las ganas de volver a la senda de victorias con las que vino, pero a nosotros nos transmite confianza y tranquilidad, por la experiencia que tiene como jugador y entrenador. Nos da tranquilidad.

-Tengo un amigo que dice que la segunda fase hay que afrontarla como tres eliminatorias de Copa.

-Tienes que tener en cuenta que no te enfrentas a rivales que tienen puntuación y que uno de ellos te tiene el golaverage ganado y te saca cuatro puntos. Entonces, tomarlo como una eliminatoria de Copa puede ser muy arriesgado. Salir fuera de casa a buscar un resultado, ir a sumar fuera de casa. Eso es estudiar para sacar un cinco. Y cuando estudias para sacar un cinco, palmas. Ve a ganar, porque te puede pasar cualquier cosa, como que un portero te puede marcar en el minuto 92. Ve a ganar, ve a cerrar los partidos y ve a no dejar margen o tener tú margen de error. Tenemos dos rivales que no jugaremos contra ellos, que suman y que vamos a competir con ellos en puntuación. El Córdoba CF tiene que ir a Tamaraceite, a La Línea y a Cádiz a ganar. Porque es el Córdoba CF y tienes que ir a ganar.

"A Pablo Alfaro yo le veo una persona muy equilibrada. Entrenador y persona son parecidos en el día a día. Es muy profesional"

-Era el año de su regreso al club y me gustaría que hiciera también balance.

-Pues hasta ahora la temporada es agridulce. Esa mezcla de alegría y tristeza. Tristeza porque en el aspecto individual soy consciente que no he dado el nivel que yo esperaba de mí. Sé lo que puedo dar y esa es la valoración que hago conmigo mismo. He venido aquí apostando por mí y el Córdoba CF apostando por mí. Era consciente del paso que daba. Cuando la situación se pone complicada y apretada, más convencido estoy del paso que di. Por eso te hablaba antes de la reivindicación personal para estos seis partidos. No hay que buscar excusas, no hay que mirar al de al lado, no, te tienes que mirar a ti, qué necesita el equipo de mi. Esa es la pregunta que yo me hago cuando igual no participo por decisiones técnicas muy respetables, porque hay compañeros que lo hacen bien. Cuando analizo un partido y encajamos gol y todos somos responsables del gol, me gusta analizarme, saber qué puedo mejorar. Con la madurez de que cuando eres un niño y tienes ese exceso de responsabilidad te fustigas. Cuando eres más joven pecas de ese exceso de responsabilidad. Estoy en un momento en Córdoba en el que tengo un equilibrio mental fabuloso para volver a mi mejor versión como Bernardo Cruz a nivel profesional. Eso es por lo que peleo todos los días, por recuperar mi mejor versión como profesional estando aquí en Córdoba. Por eso tengo esa rabia interior de que por un motivo u otro no he dado el rendimiento que yo esperaba de mí mismo.

Bernardo Cruz, jugador del Córdoba CF, durante la entrevista en El Arcángel. Manuel Murillo

-¿Es lo que deberían hacer el resto del plantel, planteárselo como tú?

-Sí. Creo que es un ejercicio que siempre ayuda. Te miras al espejo y si alguien que no se puede mentir es uno a sí mismo. La conciencia no falla. Lo he dicho en varias ocasiones. Hay un grupo humano fabuloso. Una mezcla de veteranía y gente joven muy buena, de verdad. Hay una plantilla super equilibrada en ese sentido. Y es un ejercicio que nosotros de manera colectiva ya lo hemos hecho y de manera individual tener esa honrada ambición: si he hecho tres goles quiero hacer seis esta segunda vuelta, si he cometido errores que a mi equipo le han costado goles voy a mejorar este aspecto, sobre todo en concentración. Cuando estás focalizado, concentrado, eres capaz de tomar la mejor decisión en ese momento. Si tengo que prepararme en un aspecto técnico pues hacerlo, porque lo que es un fracaso puede ser una hecatombe. Creo que es un ejercicio bueno para hacer y que si hay experiencia en la plantilla, hay jugadores con galones, con trayectoria, con partidos, de los que nos podemos apoyar en ellos… Me honra ser uno de los capitanes, pero este año le estoy muy agradecido a Xavi -Molina-, De las Cuevas y Javi Flores. Porque he aprendido mucho de ellos. He sido capitán en otros equipos, pero estoy aprendiendo de esa gestión, de ese día a día, de gestionar una capitanía. Le estoy agradecido. Además de ser unos profesionales como la copa de un pino son unas bellísimas personas. Y tienen un compromiso como si fueran de la casa.

-González Calvo dijo que a algunos jugadores les pudo la presión, a pesar de que en la pretemporada hubo compañeros que llegaron a decir que quien no la aguantara que no viniera al Córdoba CF.

-Las opiniones son eso, personales. Es el máximo responsable de todos nosotros y si lo ha dicho es porque así lo habrá percibido. Ya te digo, cada uno dentro de sí mismo tiene que saber lo que ha hecho bien y lo que ha hecho mal. Si ha habido momentos en los que algún compañero no ha sabido gestionar emociones y momentos, pues somos humanos también y hay que ser conscientes de que hay muchas emociones alrededor de todo esto. No sé si son compañeros jóvenes o no, pero ya digo que Javier -González Calvo- es el máximo responsable. Desde el club se nos están dando todos los medios necesarios para que el equipo rinda y si esa es su opinión es respetable. Y si lo dice es porque habrá visto situaciones en las que él lo ha percibido.

-¿Se hacen cuentas en el vestuario sobre los puntos a sumar en la segunda fase?

-He llevado dos semanas de números (sonríe) que no marco ni el teléfono para llamar, te lo prometo. No he hecho ninguna cábala de puntuación. Han sido dos semanas de mucho desgaste, volverte de El Ejido en un autobús… uf, que era todo silencio.

-A pesar de haber ganado.

-A pesar de haber ganado. Volver de un autobús en completo silencio después de haber ganado es bueno. Y es malo. Es bueno, porque las cosas duelen y si hay algo con lo que yo no pueda es con la indolencia, con no ser pasional, con que no nos duelan las cosas. Volviendo de El Ejido no se escuchaba un alma en el autobús, porque sabíamos que los resultados no nos habían acompañado. Y es bueno porque mostraba el grado de compromiso. 

"He llevado dos semanas de números (sonríe) que no marco ni el teléfono para llamar, te lo prometo"

-Tu hermano Fran ya está en la Primera RFEF con el Extremadura.

-Me alegro muchísimo por él. Pasó el covid-19, entró en el equipo antes de tiempo y cuando físicamente no estás bien, por querer ayudar, muchas veces perjudicamos. Ese sentido de responsabilidad del que te hablo lo tenemos los dos, muchas veces por querer sumar no ha sido así. Y pasó un momento complicado a nivel de rendimiento. Yo también he aprendido mucho de él, de hacer ejercicio de autocrítica, ser frío. Ahora le ha dado seis puntos al equipo, le ha dado fiabilidad defensiva y ha rendido a un gran nivel. Me alegro mucho por él y ahora tienen todo el derecho a soñar. Qué va a desearle uno a un hermano sino lo mejor.

-Si él sigue, no asciende el Extremadura y el Córdoba CF agarra la Primera RFEF, el año que viene…

-Él cumple contrato y no sé qué hará. Claro que sería muy especial enfrentarme a él, la situación allí está inestable. Pero enfrentarte a tu hermano siempre es especial y más especial es tenerlo a tu lado. Es la realidad.

-El Tamaraceite, primer rival, también tiene gente experta, veterana. ¿Qué partido espera?

-Nos jugamos muchísimo. Tenemos que adaptarnos desde el lunes. Adaptarnos al terreno de juego, al juego del rival, por parte del míster el estudio y análisis del rival y el campo, porque ya digo que es una persona que trabaja los detalles y nos da confianza. Vamos a adaptarnos bien, el rival lo vamos a estudiar y le vamos a dar la importancia que tiene. Pero siendo conscientes de que lo importante somos nosotros. Por mí, lo jugaba este fin de semana, ni parón ni historias, lo jugaba ya. No estoy pasado de revoluciones, estoy con esa rabia y ese coraje de que no quiero parar, de que quiero que empiecen los seis partidos. Estoy seguro y confío muchísimo en el equipo, porque hemos demostrado que puede. Ese es el mensaje que lanzo a toda la plantilla. Hemos visto que podemos y que podemos bien. 

-¿Dónde jugará el Córdoba CF la próxima temporada?

-En la Primera RFEF. Convencido al cien por cien.