La izquierda en Andalucia pone condiciones a Moreno para pedir a la UE fondos para la sequía

Los partidos de la izquierda en el Parlamento andaluz -PSOE, Por Andalucía y Adelante Andalucía- condicionaron este viernes el apoyo al Gobierno de Juanma Moreno en su petición de fondos a la UE ante la «singularidad» climática de Andalucía a la retirada de la iniciativa de regadíos de la Corona Norte de Doñana.

Juanma Moreno se reunió este viernes en el Palacio de San Telmo, sede de la Presidencia de la Junta andaluza, con los portavoces de los cinco grupos con representación en el Parlamento, a los que les entregó un documento con varias propuestas de diálogo sobre asuntos de interés para los ciudadanos.

Los tres asuntos «transversales» que destacó el presidente de la Junta fueron tener en cuenta la singularidad de Andalucía en materia climática a la hora de reclamar fondos adicionales a la UE, el debate sobre el modelo territorial que podría abrirse con los pactos con independentistas, y la financiación autonómica.

Moreno busca apoyo de la oposición para pedir a la UE fondos contra la emergencia climática

En ninguno de los tres, el presidente tuvo el respaldo total de los grupos, según se desprendió de las ruedas de prensa de cada uno de los líderes tras el encuentro con Moreno, aunque desde el Gobierno se destacó que el ofrecimiento del diálogo no se quedará en la reunión mantenida este viernes sino que «seguirá abierto y tendrá continuidad».

Los portavoces del PSOE, Juan Espadas, de Por Adelante, Inmaculada Nieto, y de Adelante Andalucía, José Ignacio García, coincidieron en considerar contradictorio que el Gobierno andaluz reclame fondos adicionales a la UE mientras que el PP mantiene en el Parlamento la iniciativa sobre los regadíos de la corona norte de Doñana.

«Los asuntos abordado no son de derecha o de izquierda sino claves para Andalucía», dijo no obstante en varias ocasiones el consejero de la Presidencia, Antonio Sanz, en la rueda de prensa tras la reunión de Moreno con el resto de grupos, una frase con la que censuraba el «electoralismo» de la izquierda en asuntos «trascendentales» para Andalucía.

Preguntado por la condición puesta por los partidos de izquierda Sanz recordó que el Gobierno andaluz lleva pidiendo diálogo hace un año y sin embargo los grupos, y especialmente el PSOE, se han negado a presentar enmiendas y a sentarse con el PP.

Tras recordar que el problema de los regadíos de esta corona norte se deben a los «incumplimientos» del Gobierno de Pedro Sánchez, pidió a los grupos «rigor» a la hora de criticar porque es un problema que «generaron» los gobiernos socialistas y no procede de una iniciativa que ni siquiera se ha aprobado.

«No pueden estar en una estrategia electoral permanente», señaló Sanz, quien lamentó que el PSOE quiera seguir en una «bronca permanente» en este asunto.

Advertencia de Espadas

El secretario general del PSOE-A, Juan Espadas, advertió a Moreno, de que la única forma de conseguir fondos de la UE atendiendo a la singularidad de una región afectada por la sequía es tener «credibilidad», algo que no logra manteniendo la iniciativa sobre los regadíos de Doñana.

Para tener «credibilidad» ante la UE, lo primero que debería hacer, según el líder socialista, es retirar la proposición de ley de regadíos de la corona norte de Doñana, y para ello hizo un llamamiento a que el PP «se separe de Vox».

En similares términos se expresó la líder de Por Andalucía, Inmaculada Nieto, quien pese a respaldar el «diagnóstico» del Gobierno andaluz de reclamar fondos a la Unión Europea ante la «singularidad» climática de la comunidad, añadió que su propia gestión y el mantenimiento de la iniciativa sobre los regadíos «debilita» la propuesta.

De la misma forma, Juan Ignacio García, de Adelante Andalucía, apostó por que Andalucía tenga los máximos niveles de autogobierno y en materia de agua coincidió con el presidente en la necesidad de reclamar más fondos a la UE pero condicionaron esta medida a la retirada de la propuesta de ley de regadíos de Doñana.

Espadas abordó con Moreno el modelo territorial, y recordó que la posición del PSOE sobre ello ya quedó plasmada en sus órganos hace diez años, y aseguró que es el Partido Popular al que no se le conoce ninguna posición sobre el modelo territorial que propone.

Confió en que el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, «hable de ello» durante el debate de investidura de finales de este mes, y pidió a los populares dejar «al margen» quién es el que defiende mejor este asunto porque el «currículum» del PSOE en este asunto es «muy importante» desde la Transición hasta la actualidad.

"Retroceso o privilegio"

Otro asunto clave para el Gobierno andaluz es el de impedir desde Andalucía que se produzca un «retroceso o privilegio» en las comunidades autónomas a raíz de los posibles pactos, y recordó que a esta comunidad le «costó mucho» llegar a ser histórica para que ahora se planteen «que las hay de segunda o tercera».

En cuanto a la financiación autonómica, el consejero de Presidencia recordó la infrafinanciación que sufre Andalucía, una situación que «no es admisible» y que no va a estar dispuesta a que se siga así porque «haya que defender mantener unos sillones en el Gobierno de España.

«En estas cuestiones hay que hacer un frente común y en otras seguir trabajado», señaló Sanz, quien relató que el presidente ha planteado también cuestiones relacionadas con los servicios sanitarios, la vivienda, el empleo, la ordenación del territorio, la simplificación administrativa o la violencia machista.

En cuanto a Vox, su portavoz, Manuel Gavira, se centró en la rueda de prensa sobre todo en la financiación autonómica para advertir a Moreno de que si la propuesta de financiación autonómica del Gobierno andaluz defiende la «igualdad y la solidaridad» entre los españoles contara con su partido pero nunca para «una guerra entre las regiones».

Por su parte, el portavoz del PP señaló que Andalucía es una comunidad «infrafinanciada», una situación que se mira con mayor preocupación e «inquietud» como consecuencia de los posibles pactos con los independentistas, por lo que cree que no es de recibo que el PSOE tenga la «tentación» de permitir para Andalucía un «trato diferencial».