El informe ‘Repercusiones psicológicas de la covid-19 en Andalucía’, presentado ayer por la Fundación Centro de Estudios Andaluces (Centra), ha revelado que más de la mitad de los encuestados (53,94%) manifiesta un mayor malestar psicológico general que antes de la pandemia. Este estudio investiga, por primera vez con datos representativos para la comunidad, las consecuencias psicológicas de la pandemia a partir de una encuesta con 3.600 participantes, mayores de 18 años, llevada a cabo en abril y mayo del 2021.

Los resultados del informe confirman que la situación de pandemia ha generado impacto y ha llegado a agravar problemas psicológicos ya existentes o provocándolos en personas que no los sufrían, según informaron sus autores en una rueda de prensa en Sevilla.

Ansiedad y depresión

El estudio detecta niveles elevados de ansiedad, depresión y estrés que sobrepasan los propios de las circunstancias previas a la pandemia y, en concreto, el porcentaje de personas que los presentan en algún grado es del 38,78%, 37,1% y 34,44%, respectivamente.

Aunque no existen diferencias estadísticamente significativas por sexo ni por grupos de edad, los mayores de 75 años han sido los que obtienen unos niveles más altos en estas tres variables.

Un 53,94% de la muestra total estudiada ha manifestado que se siente con un mayor malestar psicológico general en el momento de la entrevista, en relación con antes de que se produjera la pandemia, mientras que un 15,81% ha declarado que se encuentra igual, y otro 30,25 % que tiene menos malestar.

Ante la pregunta sobre el miedo al contagio, el 82,59% ha declarado tener algún miedo a contagiarse y, de ellos, el 39,91% miedo en menor grado, frente al 25,72%, que bastante y el 16,96%, mucho.

Entre los participantes en la muestra que tienen una relación de pareja, un 57,93% ha afirmado que no se produjeron problemas durante la pandemia y el confinamiento. Entre los que dan una respuesta afirmativa, el 30,32% ha declarado que los problemas fueron los habituales, un 7,97% tuvo problemas importantes, que fueron resolviendo, mientras que un 3,77% terminaron separándose, una tasa bastante alta según los autores del estudio.

Riesgo de suicidio

En relación con el riesgo de suicidio, se ha detectado que el porcentaje es elevado y se sitúa en el 15,19% de la muestra total, con un 1,1% de personas que habían llevado a cabo algún intento. Ante este grave problema de salud mental, los investigadores advierten en su informe de que, aunque el riesgo suicida se va incrementando con la edad, resulta «muy llamativo y preocupante» que las tasas de personas jóvenes sean también elevadas.

Respecto a las cuestiones relacionadas con las vacunas, en el momento de realizar el estudio el programa de vacunación no estaba tan avanzado como ahora y, de las 3.600 personas entrevistadas, 2.469 aún no habían recibido ninguna dosis. De estos últimos, solo un 11,3% afirmó que no se vacunaría y entre las razones más frecuentes se han esgrimido la inseguridad (60,9%), las dudas sobre su efectividad (48,5%) y que preferían esperar (31,5%).