El vicepresidente de la Junta de Andalucía, Juan Marín, no descartó ayer medidas «todavía más restrictivas» para hacer frente a la expansión «explosiva» del covid-19 en la comunidad y, aunque señaló que «el margen del Gobierno es mínimo», se podría llegar al cierre de la actividad no esencial.
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Así lo indicó en rueda de prensa telemática tras reunirse con los portavoces de los grupos parlamentarios para informarles sobre la evolución de la pandemia y las medidas adoptadas hasta este momento. Marín volvió a insistir al ministro de Sanidad, Salvador Illa, sobre la posibilidad de adelantar el toque de queda y decretar confinamientos domiciliarios en los municipios que lo requieran. «Esperemos que se nos den las herramientas jurídicas que nos permita hacer lo que hay que hacer», subrayó. También envió un mensaje de agradecimiento a los ciudadanos que de forma voluntaria, «la inmensa mayoría», se han quedado en casa a partir de las 19.00 y las 20.00 horas.
Sobre el proceso se vacunación en Andalucía, Marín mostró su deseo de no tener que interrumpirlo con la llegada de más dosis. «El ritmo de 70.000 semanales no era el deseado porque podemos llegar a 400.000 a la semana, pero garantizaba un plan de trabajo que suponía para marzo tener vacunada a gran parte de la población diana». Pero «a día de hoy no tenemos las vacunas que inicialmente se habían garantizado. El stock de reserva nos permitirá entre hoy y mañana poner la segunda dosis a los que se vacunaron hace 21 días, pero hay incertidumbre sobre si podremos seguir cumpliendo con el plan de vacunación», dijo.
Respecto al impacto económico de esta crisis, el vicepresidente consideró que «los datos son terroríficos», con una caída del PIB en el año de entre un 11 y 12%, aunque es unas tres décimas mejor que la media de España. En cuanto a las previsiones para 2021, se espera un crecimiento del 6,9%, lo que supondría recuperar más del 50% del PIB perdido en 2020.
Sobre la evolución de la pandemia se pronunció también ayer la portavoz del comité de expertos para el covid-19, Inmaculada Salcedo, confirmando que todas la medidas para frenar los contagios de la pandemia están encima de la mesa y que se estudia endurecer las restricciones. Aun así, opinó que «la capacidad del sistema sanitario no está comprometida, pero cada vez hay más ocupación de camas y de UCI, si bien en general hay holgura en los hospitales».
Salcedo calificó la situación de Andalucía de «francamente grave y preocupante», pero defendió la gestión hecha por la Consejería de Salud y volvió a insistir en la importancia de que la ciudadanía se autoconfine a partir de las 20.00 horas. Mañana se cumple un año de la constitución del comité expertos, un periodo del que Salcedo destacó la «efectividad» de las medidas adoptadas, la «contención» de la primera ola, que «se doblegó» la segunda en tiempo «récord» y la «coordinación» de la consejería con el Ministerio de Sanidad. «La situación ahora es crucial y muy dramática, pero se ha avanzado mucho y, como profesional, estamos cansados y tristes, ya que pese a las medidas se han disparado los datos», afirmó.
Sobre la vacunación, sostuvo que el ritmo «es alto», pues en menos de un mes se han administrado en Andalucía 226.666 dosis, de las 251.400 recibidas, que la pauta completa con las dos dosis está ya puesta en 25.509 personas y están llegando a Sevilla otras 79.560 dosis para continuar.
