Las asociaciones de inmigrantes calificaron ayer de "indignante" que el Gobierno ofrezca cobrar a los inmigrantes irregulares tras ser "expulsados" del sistema el pasado abril. SOS Racismo advirtió que "España va a ser la vergüenza de Europa", mientras el presidente de Médicos del Mundo considera que este es un paso más para privatizar el acceso al derecho universal a la salud. Por su parte, la Organización Médica Colegial avisó de que esta medida puede provocar, "a medio y largo plazo", problemas económicos e infecciosos y recordó que para los profesionales sanitarios es un "deber deontológico" atender a "cualquier ciudadano".