PSOE e IU no están dejando que trascienda, por ahora, la letra pequeña de la negociación de la que saldrá el nuevo gobierno andaluz. El coordinador regional de IU, Diego Valderas, no es partidario por establecer líneas rojas a priori que condicionen el diálogo, pero eso no significa que en el debate que mantiene IU con los sindicatos y las organizaciones sociales afines no afloren medidas concretas. Valderas asumió ayer una que le pidieron CCOO y UGT: que el nuevo gobierno andaluz empiece por reducir los salarios a todos los cargos electos y ejecutivos de la administración autonómica. IU planteará que "nadie pueda ganar más en Andalucía que el presidente de la Junta". En teoría este principio ya está recogido por ley desde hace dos años, aunque en la práctica los sindicatos dudan de su aplicación real y sugieren que algunos directivos de entes públicos cobran por pluses más que Griñán.
Valderas no se mostró tan rotundo con el cumplimiento del límite del déficit de un 1,5% para las comunidades, una imposición de Bruselas y de Moncloa que Griñán ha dicho que asumirá. "Se equivocan quienes santifican" el control del déficit, dijo el líder de IU, que advirtió de que las prioridades políticas de la UE podrían cambiar si el socialdemócrata Hollande gana las presidenciales francesas a Sarkozy. Respecto al Presupuesto andaluz de 2012, IU sí está convencida de que habrá que rehacerlo después de que el Gobierno central haya presentado las cuentas estatales que implican serios recortes en el gasto para Andalucía.
