Una jornada cargada de luz y alegría para despedir unos días de plenitud

Tras la tristeza de la representación del Santo Entierro, el Sábado de Gloria tuvieron lugar momentos muy esperados en el Alto Guadalquivir. El sábado procesionó la Soledad en El Carpio, que llegó a la parroquia pasadas las 23.30 horas, y en Villa del Río Nuestra Señora de las Angustias, una cofradía joven que está ganando en plenitud durante los últimos años. En Pedro Abad tuvo lugar la tradicional quema de los Judas, que volvieron a convertirse en los protagonistas de un pueblo que se toma la revancha con el traidor de Jesucristo. En Adamuz el Domingo de Resurrección se vivió uno de los momentos más esperados del año con la llegada de la Virgen del Sol, que fue trasladada desde la ermita del Cerro hasta el pueblo, donde fue recibida por Nuestro Señor Resucitado en una jornada cargada de emociones.

En Montoro también salió el Resucitado desde la ermita de Virgen de Gracia, para realizar su tradicional recorrido en una jornada espectacular, con una luz radiante. Igualmente ocurrió en Villafranca de Córdoba, Cañete de las Torres, Bujalance, El Carpio y Pedro Abad. En esta última localidad también destacó el encuentro que protagonizaron en la glorieta de la Centuria Romana, así como en Villa del Río, donde a la Soledad se le cae el manto negro y luce el blanco cuando ve llegar a su Hijo.