Las diez compañías más «sucias» de España lanzan a la atmósfera «el 62 % de las emisiones fijas y el 25 % de las totales del país», con la energía, el petróleo y el cemento como los sectores más contaminantes, según datos de un informe del Observatorio de la Sostenibilidad.

El documento Informe de Emergencia Climática en España, que que se presentó este viernes en el Museo de Ciencias Naturales de Madrid, en el marco de la celebración de la Cumbre del Clima (COP25), señala a Endesa, Repsol, Naturgy, EDP y ArcelorMittal como las que «más contribuyeron al cambio climático» en España en 2018.

Entre las más contaminantes se «debería incluir también a Iberia, Air Europa y Vueling», aseguró el experto en cartografía y bases de datos, Raúl Estévez Estévez, aunque declaró que «es imposible cuantificar sus emisiones».

El objetivo del informe es «ser referencia en el futuro mediante la actualización continua de la base de datos a partir de ciencia ciudadana y mapas colaborativos», que serán verificados por científicos para que exista «una rendición de cuentas, no se realicen políticas contradictorias y se haga un seguimiento del estado real de la emergencia climática en el país».

El estudio «cuantifica cómo se está reproduciendo la situación de emergencia climática en el país», explicó el doctor en Ecología y miembro del Observatorio, Fernando Prieto. Asimismo, pone énfasis en la relación entre soluciones basadas en la naturaleza y las infraestructuras verdes como modelos de «buenas prácticas».

Las comunidades autónomas que más emisiones de efecto invernadero generaron entre 1990 y 2018 fueron Andalucía, Cataluña, Castilla y León, Galicia y Asturias, aunque algunas de ellas también figuran en el listado de las que más han reducido sus emisiones como Asturias, Castilla y León y País Vasco.

Por otra parte, la relación entre el Producto Interior Bruto (PIB) y las emisiones de dióxido de carbono (CO2) «sigue sin desacoplarse, ya que las emisiones subieron un 17 % entre 1990 y 2018 y el PIB nacional lo hizo en un 73 %», mientras que en la UE «las emisiones cayeron un 22 %, creciendo el PIB un 58 %».

«Lo que creíamos que afectaría a generaciones futuras, nos está afectando a nosotros ya», señaló Prieto. En este sentido el informe recuerda «el aumento de la temperatura en 1,5 grados en tan solo 57 años, el incremento del nivel del Mediterráneo en 3,4 milímetros por año desde 1993 y que el verano se está alargando unos 9 días de media por década».

El Observatorio ha propuesto una herramienta informática aún por desarrollar con 46 variables, describió Estévez, que destacó el proyecto Corredor Verde del Mediterráneo para restaurar la biodiversidad y la funcionalidad como ejemplo de soluciones basadas en la naturaleza.

El exdirector general de la Unesco Federico Mayor Zaragoza señaló que la COP25 de Madrid «es la última cumbre para que pasemos a la acción», ya que en todas las cumbres celebradas hasta el momento «no ha habido ninguna trascendencia práctica».