El próximo gobernador

Posiblemente, el responsable institucional español mejor valorado en Europa en los últimos años haya sido el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos.

Siempre didáctico y clarificador, ha ejercido el cargo con reconocida profesionalidad, lo que le ha valido el aprecio del resto de sus colegas del Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo, comenzando por Joachim Nagel, del Bundesbank alemán.

Su método ha sido tan obvio como complejo: mantener la institucionalidad de la institución. Una idea de perogrullo que, en la España de hoy, es inaceptable porque cualquiera que desempeñe un cargo público debe alinearse con la acción política, comenzando, precisamente y por supuesto, con quienes están al frente de las instituciones del Estado.

Ahora, llega la hora de su relevo y, vista la situación en la que nos encontramos, cualquier cosa es posible. Los nombres que se miran con la lógica del Banco son reconocidos. A destacar Fernando Restoy, que ya fue subgobernador con Luis M. Linde, la subgobernadora actual, Margarita Delgado, o José Manuel Campa, presidente de la Autoridad Bancaria Europea. Si vamos por ahí, por la vía institucional y profesional, con estos u otros perfiles similares, bien. Si no es así, demostraremos, una vez más, la misma vieja irresponsabilidad.

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