Los desayunos de Diario CÓRDOBA contaron ayer con la presencia del prestigioso economista norteamericano James M. Roberts, que analizó La economía en la era de Donald Trump y el ascenso del presidente republicano al poder. Roberts es uno de los responsables de la publicación del llamado índice de libertad económica, que elabora anualmente Heritage Foundation, un centro de investigación política fundado en 1973 y cercano a políticos como Margaret Thatcher, Ronald Reagan o George W. Bush. El índice de libertad económica se basa en doce indicadores creados por la fundación de Roberts y el diario The Wall Street Journal para medir el grado de libertad económica en los países del mundo. Lideran este ránking del liberalismo económico mundial Hong Kong, Singapur, Nueva Zelanda, Suiza y Australia, y lo cierran, Corea del Norte, Venezuela, Cuba y República del Congo.

Roberts estuvo acompañado en la mesa de Los desayunos por el director de Diario CÓRDOBA, Francisco Luis Córdoba, y el rector de la Universidad Loyola Andalucía, Gabriel Pérez Alcalá, quien afirmó que se pueden compartir o no los fundamentos de la era Trump pero que «por salud democrática» es beneficioso siempre tener este tipo de encuentros. El director del periódico, por su parte, añadió que qué mejor ocasión que estrenar «la internacionalización» de Los desayunos con un conferenciante que pueda explicar «cómo se va a traducir entre los amigos periféricos» las políticas que desarrolle Trump.

En su conferencia, el analista económico reconoció que la campaña electoral de Trump fue «un poco populista» y «agresiva», que la política actual, de hecho, se ha convertido en un show televisivo, e incluso admitió que «el personaje» que Trump ha interpretado antes de su ascenso ha sido «sorprendente». No obstante, considera que en el poco tiempo que lleva el mandatario republicano en el poder «ha actuado como el típico presidente republicano» ya que el puesto «cambia a la persona». De hecho, dijo, es algo que también le ocurrió a los presidentes Kennedy y Obama. «Eso refleja la fuerza de las instituciones democráticas de los EEUU y no hay que preocuparse porque el personaje Trump va a ser un presidente como cualquier otro», afirmó. Es más, a juicio de Roberts, con el nuevo inquilino de la Casa Blanca se ha abierto un periodo de esperanza y que tiene «una oportunidad de hacer una política muy positiva». Así, y pese a defender Roberts el incremento del presupuesto militar norteamericano y haber definido a Putin como «una amenaza», abogó por no entrar en enfrentamiento con Corea del Norte -- «sería um sinsentido», apuntó-- y en centrarse en el impulso de la economía nacional.

En este sentido, defendió que los tratados de libre comercio deberían no contemplar «planteamientos medioambientales o derechos laborales», al tiempo que reivindicó un mayor proteccionismo del trabajador nacional frente a los extranjeros.

Roberts analizó los resultados de las últimas elecciones de Estados Unidos, que «han cogido por sorpresa a todos el mundo, menos a Donald Trump», bromeó. El analista económico explicó que los votos del candidato republicano se han concentrado en los estados de California y Nueva York y se han decidido en estados como Florida y Pensilvania. Precisamente, a su juicio, esa fue una de las claves de la victoria republicana que centró sus esfuerzos en esos dos estados, «mientras que Hillary Clinton no lo hizo».

CONEXIÓN BREXIT // Para Roberts, además, existe una conexión clara entre el voto del Brexit en Gran Bretaña y el voto que ha dado el gobierno a Donald Trump en Estados Unidos, y atribuye dicha conexión al carácter «anglosajón» de ambos países, que implica un «sentirse diferente del resto». Asimismo, explicó el origen de ese voto en el descontento entre quienes han perdido sus trabajos en sectores clásicos que han entrado en crisis.

«En ambos países fueron los trabajadores tradicionales quienes expresaron su voluntad de cambio. En Inglaterra fue el área de los midlands y el norte los que rechazaron la globalización; y en América, Pensilvania o Ohio quienes habían trabajado antes en la industria del automóvil y ahora están en paro y veían difícil cambiar de lugar de residencia para buscar un nuevo trabajo», comentó.

Además sumó a esta explicación de los resultados electorales norteamericanos el hartazgo ciudadano hacia los 8 años de la era Obama y sobre todo hacia «su presión fiscal». No tuvo palabras amables para Hillary Clinton, a la que tachó de «torpe» frente al «genio» de su marido, aunque para él la clave de su derrota frente a Trump fue querer «prorrogar el mandato de Obama siguiendo las mismas políticas y sin representar algo diferente».

Fin de la era Obama // James M. Roberts vinculó también la derrota de Barak Obama al «resultado de una reacción violenta en contra de su administración y porque quiso cambiar valores tradicionales y morales de la sociedad americana». Los ciudadanos, dijo, «no querían aceptar esos cambios tan drásticos».

Al hilo de sus críticas sobre la política de Defensa del anterior presidente demócrata, el conferenciante defendió el incremento del presupuesto militar de Estados Unidos, recientemente aprobado por Trump. «Después de 20 años de conflicto en el Medio Oriente nuestro equipamiento militar es viejo y requiere que se renueve», sostuvo Roberts.

En último lugar, expresó su deseo de que el presidente republicano siga confiando en las directrices marcadas desde la Heritage Foundation, a la que pertenece, y que cumpla su promesa de bajar los impuestos y el gasto estatal. También expresó la necesidad que hay, a su juicio, de afrontar la reforma del estado federal de los Estados Unidos, que continúa siguiendo el modelo establecido en los años 30, reducir la plantilla de funcionarios y la defensa del trabajador americano frente a lo foráneo.

SOBRE ESPAÑA // Acerca de España, Roberts contó que su puntuación respecto al índice de libertad económica es de 63,6 por encima de la media, aunque matizó que han observado «una ligera bajada» de la libertad económica en el último año relacionada, dijo, no tanto con la corrupción como con la lentitud en la respuesta del sistema judicial español.

Sobre el índice de libertad económica, el conferenciante afirmó que los países que van a la cabeza de este ránking «tienen mayores niveles de desarrollo económico e indicadores de riqueza»; que quienes siguen sus recomendaciones prosperan y que «por eso en los últimos 50 años hemos visto una reducción de la pobreza» a nivel internacional, afirmó.

Los desayunos de CÓRDOBA están patrocinados por la Universidad Loyola Andalucía y Cajasur, y la colaboración de Jicar, ATA, Ágora, Magtel, Parque Joyero y Piedra.