El director de producto de Netflix reconoce la importancia que tienen los datos para la plataforma, pero asegura que no se puede hacer nada sin una visión creativa.

-Su modelo de éxito atrae cada vez más a la competencia...

-Sí, veremos más competidores, pero nuestro mercado no es excluyente, como el de la telefonía, donde si eres cliente de una compañía, casi con seguridad no lo eres de otra. Nuestros consumidores pueden suscribirse a múltiples canales, y es lo que sucede. En EEUU, donde más competencia hay actualmente, es habitual que suscriptores de Amazon o Hulu lo sean de Netflix. Todos hacemos crecer el mercado.

-¿No temen saturar al usuario?

-No lo creo. Hasta ahora hemos visto que, a medida que incorporamos contenidos, la gente pasa más tiempo en Netflix. El modelo de consumo está cambiando. Antes elegías entre unas pocas opciones, ahora el consumidor se plantea qué quiere ver de verdad. Podemos tener diez opciones increíbles para cada usuario y ellos eligen lo que más les interesa en ese momento.

-El uso del análisis de datos para crear series y películas, ¿no supone un freno a la creatividad?

-Los datos no reemplazan la creatividad, es al 50%. El análisis de datos nos dice qué tipo de show nos ayuda a rellenar un hueco en nuestra programación, pero no puedes hacer nada sin una visión creativa.

-¿Cree que cambiará el modelo de las ventanas de exhibición?

-Sí. Los consumidores quieren acceder al contenido, y vemos una y otra vez que si quiere algo, en este mundo con tantas posibilidades tecnológicas, encuentra cómo obtenerlo. Cuanto más fácil y adecuadamente le pongamos la opción legal, más elegirán esta opción.

-¿Hay planes para España?

-Ahora se estrenará la segunda entrega de Las chicas del cable. Estamos muy contentos de cómo funciona. Habrá más, seguro.