Los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil controlarán esta semana 7.000 vehículos en la provincia en una nueva campaña de vigilancia del uso del cinturón de seguridad y de los sistemas de retención infantil. El subdelegado del Gobierno, Juan José Primo Jurado, y el jefe provincial de Tráfico, José Antonio Ríos, han explicado esta mañana que el año pasado se formularon 1.918 denuncias por no utilizar el cinturón de seguridad, lo que la convirtió en la segunda infracción más denunciada.

Además, a pesar de que se conoce que su utilización reduce a la mitad el riesgo de muerte en caso de accidente, cuatro de los nueves fallecidos en las carreteras cordobesas en el 2015 no hacían uso de dicho dispositivo, lo que supone el 44%. Igualmente, han destacado que en los asientos traseros se duplica el no uso del cinturón, siendo 20 de cada 100 personas las que incumplen la norma.

Otro dato destacado es que en las vías urbanas el uso del cinturón de seguridad es menor que en las interurbanas. Distinguiendo por zona y tipo de vía, en las autopistas y autovías la práctica totalidad de los ocupantes utilizan el cinturón de seguridad (96%) y algo menos en las carreteras convencionales (93%). En el caso de las vías urbanas, en las ciudades de al menos 100.000 habitantes, como Córdoba, su uso ronda el 84%, y en los municipios de menos de 60.000 habitantes se sitúa entre el 70 y 80%.

Primo Jurado ha hecho una llamada a la “importancia absoluta” de estas medidas de seguridad que “no son nada difíciles de asumir y que, sin duda alguna, pueden ayudar a seguir bajando el número de víctimas de accidentes”. De su lado, el jefe provincial de Tráfico ha resaltado que “no debemos olvidar a los niños”, que en caso de impacto “sufrirían consecuencias muy graves”, y ha recordado que la “responsabilidad es de los mayores”.