El pasado 26 de septiembre, se cumplía el 30 aniversario de la muerte del torero Francisco Rivera Paquirri tras ser cogido por el toro Avispado en la plaza de toros de Pozoblanco. El Ayuntamiento lo conmemoró con el descubrimiento de un mosaico en el patio de caballos del coso de Los Llanos.

El pueblo recuerda con respeto la figura del torero muerto. Un recuerdo de lo que ocurrió aquella tarde de 1984 que no se borra en una localidad que quedó marcada, a su pesar, por ese desgraciado hecho. Pero el Pozoblanco de hoy poco tiene que ver con el de hace tres décadas, empezando por el escenario de la tragedia. El coso de Los Llanos de entonces ha dado paso a una magnífica plaza de toros visitada por centenares de personas, sin duda atraídas muchas de ellas por el trágico suceso. Sin embargo, no encontrarán, por ejemplo, vestigios de aquella vetusta enfermería en la que fue atendido el torero. Esta se remodeló como toda la plaza, que fue reinaugurada en el año 2001, y hoy es un coso que ha cambiado su fisonomía.

El cirujano de la plaza de toros, Eliseo Morán, que aquella tarde atendió a Paquirri, también mantiene vivo el recuerdo de lo que ocurrió "como si hubiese sucedido ayer", afirma. Esta feria volvió como cada año a Pozoblanco para seguir ejerciendo su labor médica, pero recalca que "la enfermería de ahora está perfectamente montada y además hay otra cosa que es importante", puntualiza, "y es que Pozoblanco cuenta hoy con un hospital que es la residencia que entonces no había y que podría haber evitado el traslado del toreo a Córdoba". Un viaje grabado a fuego en la memoria de Eliseo Morán. Las ambulancias de entonces no tenían nada que ver con las de hoy en día, y eso a pesar de la pericia del entonces conductor que trasladó a Paquirri, Francisco Rossi, fallecido en el año 2010. "Un traslado desde la carretera antigua de Pozoblanco a Córdoba era una tragedia, con un enfermo grave esa vía no ayudaba nada", insiste. Carretera que han conocido bien los habitantes del norte de la provincia, que podían llegar a tardar hasta dos horas en llegar a la capital. Hoy, con el nuevo trazado, se puede llegar a Córdoba desde Pozoblanco en poco más de tres cuartos de hora. Esta misma carretera, por cierto, utilizó el único superviviente de aquel cartel, Vicente Ruiz El Soro , para llegar a Pozoblanco, donde pregonó la feria taurina de este año. El torero ha pedido volver a torear en Pozoblanco, pero sin pasar por el hotel Los Godos. Y así fue, porque el emblemático hotel en el que Paquirri pasó sus últimas horas antes de encaminarse a la plaza, cerró sus puertas en septiembre. Pozoblanco ha vivido sus fiestas y lo ha hecho en un recinto ferial distinto al de aquella época y es que todo ha cambiado, pero aquí se sabe guardar con respeto los recuerdos mirando al futuro.