¡Dígaselo a los parcelistas!

La posibilidad de segregar el pago de IBI (en aquellas propiedades en proindiviso), viene motivada por el Catastro al adoptar la resolución del TEAM (Tribunal Económico Administrativo) de 14-01-09 creando jurisprudencia y el artículo 35.6 de la Ley General Tributaria, que obliga a que el pago del IBI de las propiedades en proindiviso sea segregado a este solo efecto individualmente. Y no como manifiesta el señor Aumente que ello se debe a la moción impulsada en el Pleno del mes de junio por el PSOE a la que adhirieron posteriormente los demás grupos. Otra cosa muy distinta es que, presentada toda la documentación en la delegación de Economía y Hacienda de Córdoba (Gerencia Territorial del Catastro), y una vez examinada la documentación por el Catastro central, este la envía vía telemática a la Gerencia Municipal de Urbanismo para que confirme y ratifique que los datos aportados corresponden con lo solicitado y una vez verificado se devuelva de nuevo la documentación a la gerencia del Catastro de Hacienda, que es la que definitivamente examina su veracidad y permite al Ayuntamiento para que este emita los recibos individualizados del IBI a cada propietario. Todo este proceso se realiza gracias al acuerdo entre administraciones (la central y la local). Ahora bien, si a lo que Aumente se refiere es que, una vez recibida la documentación en la Gerencia Municipal de Urbanismo (oficina del Catastro), dicha documentación se remite a gestión catastral, donde duerme el sueño de los justos esperando que la misma sea adjudicada a la empresa externa que el Ayuntamiento debe contratar para realice el trabajo de segregación, desde enero de 2016 hasta julio de 2017 no ha sido contratada ninguna empresa, estando paradas las segregaciones. Así que la culpa en la tardanza es del Ayuntamiento y no del Catastro central. Dígaselo así a los parcelistas.