La misión especial de la OSCE en Ucrania aseveró hoy que no puede constatar la retirada del armamento pesado de la línea que separa las posiciones de Kiev y de los separatistas prorrusos en el este del país.

"Aunque observamos la retirada del armamento, de momento no podemos verificar su repliegue", señala un comunicado de la misión internacional.

Los observadores reiteraron que para constatar el cumplimiento del segundo punto de los acuerdos firmados en Minsk el 12 de febrero necesitan tanto el "acceso total e ilimitado" a la zona del conflicto como "datos básicos" acerca del armamento de los dos bandos.

"Necesitamos datos sobre dónde se emplaza el armamento en la actualidad, qué rutas se emplearán para su repliegue, y también dónde se concentrará el armamento pesado" una vez se retire del frente, subrayó la OSCE.

Las milicias separatistas anunciaron este domingo que completaron el repliegue de su armamento pesado de la línea de separación de fuerzas.

Kiev desmiente las declaraciones de sus enemigos y les acusa de reagrupar su artillería en otros puntos del frente.

El repliegue busca crear a lo largo de la línea de separación de fuerzas de una franja de al menos 50 kilómetros de ancho libre de armamento pesado.

Según la OSCE, garante del proceso de paz y de los acuerdos de Minsk, la gran extensión del territorio del que debe retirarse la artillería y otro armamento pesado dificulta enormemente la verificación del repliegue.

Más de 6.000 personas han muerto en el este de Ucrania desde que en abril del año pasado estalló el conflicto armado, precedido por una sublevación prorrusa en las regiones ucranianas de Donetsk y Lugansk.