¿Nunca se han preguntado cómo debe ser llegar a un pueblo deshabilitado después de vivir en las cómodas condiciones que aporta la ciudad? La respuesta a esta pregunta la deben tener los alumnos y alumnas de 3° de ESO del instituto Averroes. Estos chicos han puesto toda su ilusión en el proyecto de Recuperación y utilización educativa de los pueblos abandonados, una iniciativa que les ofrece la oportunidad de conocer y valorar lo que supone la vida rural suponiendo en ellos un desarrollo personal.

Granadilla, un pueblo deshabilitado de Cáceres, ha sido el lugar visitado por los alumnos y alumnas de IES Averroes. El pueblo permite una forma de vida diferente, alejada de las condiciones habituales en la ciudades. Además, ofrece el conocimiento de algunos oficios y tareas tradicionales, como construcción y albañilería, mantenimiento y conservación, agricultura y ganadería, jardinería, artesanía, etc.

Los alumnos y alumnas del IES Averroes no son los únicos habitantes de este pueblo, sino que comparten entorno con alumnos de centros de otros institutos que también participan en el programa. Esto supone una oportunidad para aprender a convivir en bienestar, de una forma más cercana y auténtica. Además, el hecho de ser los únicos habitantes del pueblo conlleva al alumnado que su ocio dependa exclusivamente de ellos, hecho que desarrolla su creatividad.

Desde su llegada a Granadilla, el alumnado se ha convertido en lapoblación del pueblo y ha debido hacerse cargo de todas sus facetas. Durante la mañana se organizan los oficios de mantenimiento, agricultura, ganadería, servicios generales, etc. Tras el bocadillo matinal existe la posibilidad de elegir entre un grupo diverso de actividades relacionadas con el ámbito de la artesanía, la comunicación, el medio ambiente y/o la animación. También se encargan de las tareas de comedor y de la limpieza de sus casas y espacios comunes. A partir de la merienda hay actividades alternativas. Tres días a la semana están organizadas por los monitores, quedando dos de ellas para la autogestión.

Por la tarde se produce el desarrollo del proyecto de centro. Pero todo no es trabajo en Granadilla. También hay actividades destinadas a fomentar la convivencia y la integración entre diferentes individuos y grupos. Así, por la noche se realizan juegos y actividades que fomentan el ambiente festivo que vuelven a dar vida a un pueblo que está deshabilitado.