En el CEIP La Aduana tienen muy claro que si el timbre suena, algo muy grave pasa. Ni los alumnos ni los profesores pueden confundir este sonido con el inicio o el fin de las clases. En su cole no. Y es que este centro lleva ya unos ocho años anunciando el recreo a ritmo de jazz, villancicos e incluso de marchas fúnebres. Todo depende de la selección que realice Charo Gómez de la Cueva, maestra de Música y responsable de esta curiosa manera de marcar los horarios.

Gómez de la Cueva explica que cuando llegó al colegio ya traía en la cabeza la idea, que había oído en un centro valenciano. No le hizo falta convencer al profesorado, ni a la dirección, pues se encontró que llevaban un año poniéndolo en marcha. A partir de ese momento, todos los días suena cuatro veces la selección musical de la maestra de música: al inicio y final de las clases, para anunciar el recreo y cuando termina el comedor. El objetivo, al margen de acabar con la estridencia del sonido de la sirena, es sensibilizar a los alumnos musicalmente hablando, sin que ello les resulte una obligación.

Para ello, cada quince días la música cambia, generalmente en torno a una festividad o hecho concreto al que se le pueda marcar el ritmo fácilmente. Por ejemplo, en estos días de noviembre, es Marcha Fúnebre para una marioneta la sintonía elegida, con motivo de la celebración de Halloween y el Día de Todos Los Santos.

Aparte de lo que se escucha, que hace que a veces incluso se vea a los niños tarareando o bailando en las filas para entrar a clase, la selección musical va acompañada de carteles explicativos en los que se expone el título de la melodía, su intérprete o autor, así como alguna curiosidad que pueda resultar atractiva para los alumnos. En este sentido, la directora del centro, Dolores Bocero, explica que durante la semana cultural, los carteles desaparecen y se hace un concurso mediante el que, a base de pistas, los estudiantes deben adivinar de qué música se trata.

Bocero reconoce estar encantada con esta iniciativa con la que "se trata de humanizar las cosas y desarrollar la sensibilidad musical y un ambiente relajado y agradable".