NOMBRE RAUL BRAVO

FECHA DE NACIMIENTO 14 DE ABRIL DE 1981

CLUBS ALMOINES, GANDIA, CASTILLA, REAL MADRID, LEEDS, OLYMPIACOS, NUMANCIA, RAYO Y BEERSCHOT

CONTRATO TIENE UNA CLAUSULA DE RENOVACION EN CASO DE ASCENSO

--Vaya triunfo el de Gijón.

--Sí, la verdad es que es algo que nadie esperaba. Creo que la afición, a raíz de los últimos resultados e incluso los jugadores, con la dinámica en la que estábamos metidos, sabíamos que era muy difícil ganar allí. Pero bueno, al final hicimos un partido muy serio defensivamente, demostramos que lo de jugar bonito no es lo más importante, porque es verdad que fue un partido en el que no tuvimos mucho toque de balón, muchas triangulaciones, aunque tuvimos algunas, pero lo fundamental fue el bloque defensivo.

--Tener fútbol con bajas como las de Abel, Caballero o López Silva es algo complicado.

--Creo que el equipo está hecho para ese tipo de jugadores. Para Caballero, para López Silva y Abel. Son los tres que, prácticamente, más posesión tienen y más fútbol en las botas. Es verdad que debimos suplir eso con correr, ser agresivos, con cortar, parar el ritmo. Hubo un poco de todo, incluso perdiendo tiempo en los saques de banda. Recurrimos a un poco de todo para no dejar que ellos tuvieran esa continuidad que tenían.

--Con Ferrer, dos triunfos fuera y una derrota por la mínima. ¿Por qué se atranca más el equipo en El Arcángel?

--Para que veas, el fútbol es así de caprichoso. En la primera vuelta fuimos el mejor equipo en casa o de los mejores y en la segunda vuelta aún no hemos ganado. Para que veas cómo cambia esto. Si hubiéramos mantenido la línea de mejor equipo en casa estábamos prácticamente en ascenso directo.

--¿Le dará tiempo al equipo a volver a colocarse arriba?

--Hombre, tiempo claro que hay. Lo que pasa es que a lo mejor el error es ese. Pensar que si ganamos dos partidos nos colocamos ahí, si ganamos tres estamos en play-off ... Creo que el equipo debe ir mirando el próximo partido, cada encuentro es un mundo. Pensar en que hay que ganar el domingo en casa al Alcorcón y ver dónde estamos. Y a la siguiente semana ganar y ver luego dónde estamos.

--¿Qué tal con Ferrer?

--Bien. La verdad es que bien, porque los entrenamientos son todos con balón, intenta siempre jugar al fútbol. Para el tipo de jugadores que tenemos nos viene bien. Lo que pasa es que en el cambio de entrenador todos necesitan un tiempo para acoplarte y enseñarte sus ideas. Creo que más o menos ya lo hemos cogido y lo importante es que en estos partidos que quedan seamos uno de los mejores equipos para intentar conseguir el objetivo.

--En Gijón, con el brazalete de capitán tras la salida de Xisco.

--Sí, es la tercera vez que hago de capitán. Y el próximo domingo, tal y como pinta la cosa (risas) me parece que me tocará otra vez. Ya lo he dicho de broma: "La maldición del brazalete". Madre mía, todos los que se lo ponen, caen. El míster cuando llegó me puso a mí como cuarto capitán y es bonito el que un club, un entrenador te dé esa confianza de líder en el equipo. Es bonito.

--¿Se esperaba llegar a este nivel después de la lesión en Eibar?

--Claro. Lo que pasa es que la gente sí que dudaba porque tú tiras mucho de Wikipedia, miras atrás, el año pasado ocho partidos, el año anterior otros seis o siete y eso a la gente le hace dudar.

--Dudas que la gente ha transformado en alabanzas y deseo de que continúe.

--Sí. La gente al final es agradecida. Aunque un equipo vaya mal y tenga malos resultados ellos premian el esfuerzo y que te dejes la piel en el campo. En mis condiciones destacan más las físicas que las técnicas. He sido un jugador que me vacío en cada partido, lo doy todo. La gente, aunque el equipo haya tenido una etapa en la que ha ido mal, ven que Raúl Bravo... Que, bueno, que están contentos conmigo, porque la afición quiere gente que lo dé todo en el campo, que se deje todo y luego, si pierdes, no pueden recriminarte nada.

--¿Qué le pareció la actuación de su pareja en el campo, Bernardo?

--El otro día me sorprendió gratamente. Creo que tiene condiciones para ser un buen central. Desde aquí le queda muchísimo para llegar a eso. Pero a día de hoy debe estar agradecido, porque con la edad que tiene estar jugando en Segunda es un privilegio, eso no lo pueden hacer muchos.

--Se espera un buen ambiente el domingo ante el Alcorcón.

--El equipo ya lo está pensando. Es una motivación especial. Hoy llegas al estadio, ves el césped cómo está, ves la grada y piensas: "el domingo va a estar espectacular el ambiente". Vienes de ganar en Gijón, la gente estará a muerte con nosotros y creo que los jugadores ya están pensando inconscientemente en eso.

--Y en la próxima temporada, ¿qué? ¿Seguirá?

--Ojalá pudiera contestarte a eso, porque ni lo sé. Yo siempre he dicho que por qué no. La verdad es que como tú has dicho la afición está conmigo que no veas y al final uno lo que quiere es eso. La afición está contigo, el club también, yo me siento querido, la ciudad me gusta. No sabemos dónde vamos a estar el año que viene, estamos en un momento importante de la temporada. Si para arriba o para abajo. Si es para arriba, tengo contrato. Hay una cláusula de que si subo a Primera continúo. Mi sueño sería ese, subir a Primera con el Córdoba y quedarme. Si nos quedamos en Segunda sería cuestión de hablar con el club y ver si llegamos a un acuerdo.