El Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Priego superó ayer un nuevo trámite tras la aprobación por el Pleno de la Corporación municipal del último proceso previo a su aprobación definitiva por la Junta de Andalucía, lo que supondrá su efectiva entrada en vigor.

Una vez incluidas en el documento 42 de las 127 elegaciones presentadas, a las que hay que sumar otras 27 aceptadas parcialmente, así como una serie de pequeñas modificaciones, la Corporación daba el visto bueno al PGOU ocho años después de su inicio, como apuntaba en su exposición la presidenta del Area de Urbanismo, Cristina Casanueva, que lo definió como un documento "que nació como una necesidad social y que es fundamental para Priego".

Junto a las 1.615 nuevas viviendas, los más de 161.000 metros cuadrados de espacios libres, los 15,5 kilómetros de carril bici, así como varias actuaciones sistemáticas relacionadas con enclaves monumentales de la localidad, principalmente en el casco histórico, el PGOU mantiene la zona que se destinará a la futura estación de autobuses junto al Bajo Adarve y la gasolinera de La Vega, pese a la negativa que en este sentido ha mostrado IU, basando en este sentido su portavoz, Manuel Rodríguez, la abstención en este expediente de su grupo.

Por su parte, socialistas y andalucistas votaron a favor, pese a que para el PA, como apuntó su portavoz, Juan Carlos Pérez Cabello, "el PGOU es poco ambicioso y se ha quedado corto en ciertos temas", mostrando igualmente su desacuerdo con el gran polígono industrial propuesto en el documento, ubicado en El Campillo, en detrimento de la zona planteada en un principio en los Llanos de la Bomba, junto a la aldea de Zamoranos.