El consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, José Fiscal, vivisitó ayer la Cueva del Ángel, en Lucena, acompañado por el alcalde y presidente de la Mancomunidad de la Subbética, Juan Pérez; el delegado territorial, Francisco Algar; el concejal de Patrimonio, Manuel Lara; el cronista oficial, Francisco López Salamanca, y el arqueólogo Cecilio Barroso. José Fiscal informó de las mejoras que van a experimentar los accesos a esta cueva. La Consejería invertirá alrededor de 300.000 euros a través del marco financiero europeo del programa Feader para mejorar los accesos a la cueva y realizar obras de infraestructuras.

José Fiscal indicó que no solo se pretende facilitar el acceso a la cueva a través de la mejora de la pavimentación y trazado, sino también optimizar la seguridad para llegar a ella. Asimismo, el proyecto incluye la creación de una zona destinada a aparcamientos, aseos, mirador y un pequeño punto de información.

El titular de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio calificó la Cueva del Ángel como una de las joyas andaluzas de la investigación prehistórica que el hombre habitó entre 100.000 años y 450.000 años antes de Cristo. Abarcaría desde el periodo del Pleistoceno medio hasta el Pleistoceno superior, por lo que la Cueva del Ángel se sitúa dentro del primer nivel de interés científico no solo de Andalucía, sino de toda la Península Ibérica.

INVESTIGACIÓN // En este sentido, Fiscal señaló que el objetivo de la Junta de Andalucía es doble ya que, por una parte, se propicia la investigación científica para que se conserve este incalculable patrimonio; y por otra, se pone al disfrute y conocimiento de los ciudadanos para hacerlos partícipes de su propia historia. «Una vez más, la conservación de nuestro patrimonio se convierte en un aliciente para el desarrollo sostenible, en este caso, para el turismo», indicó el consejero.

En la cueva existen varias zonas, unas dedicadas exclusivamente a estudios científicos y otras que puede visitar el público en general. La Cueva del Ángel se encuentra, además, en un entorno privilegiado, en un enclave situado entre espacios naturales protegidos de las Zonas Húmedas del Sur de Córdoba y el Parque Natural de las Sierras Subbéticas, como es la sierra de Aras.

La Cueva del Ángel aspira a convertirse en Patrimonio de la Humanidad, dado que es uno de los enclaves más importantes del mundo y uno de los lugares donde primero se utilizó el fuego, según informó el arqueólogo Cecilio Barroso, que dirige el equipo de expertos que viene trabajando en los restos aparecidos en la cueva. Un total de 70 investigadores procedentes de países como Francia, Gran Bretaña, Estados Unidos, Italia, España y otros están trabajando en el proyecto de la Cueva del Angel desde distintas vertientes, participando en el mismo entidades como las universidades de Harvard, Barcelona o Ferrara, así como la Fundación Biomédica del Hospital Reina Sofía de Córdoba. Ahora se pretende analizar el ADN de los restos encontrados para saber las enfermedades que sus habitantes padecían.