El presidente de la Asociación para la Defensa del Borrico (Adebo), Pascual Rovira, ha lamentado hoy la "agonía" del burro que murió el pasado domingo después de que un ciudadano se sentara encima de él mientras el animal participaba en un belén viviente de Lucena (Córdoba).

Rovira ha afirmado en declaraciones a Efe que el animal, llamado "Platero", fue donado por unos ganaderos de la localidad cordobesa de Jauja al Ayuntamiento de Lucena, y participaba en un belén viviente organizado por el Consistorio lucentino.

Según ha explicado, el pasado miércoles, un hombre se sentó encima del animal y el peso de su cuerpo dejó "malherido" al burro, que falleció finalmente el pasado domingo, después de una "lenta agonía".

Rovira ha señalado que estos animales sufren ante la avalancha de luces, música y gente que producen este tipo de atracciones, lo que les provoca un "alto estrés", dado que, además, el burro "ya no está acostumbrado al trabajo físico".

Por ello, ha pedido públicamente que no se usen estos animales en este tipo de atracciones o en cabalgatas de reyes, y ha criticado especialmente el belén viviente de Lucena, porque en él no hay "la vigilancia suficiente", y porque "hay gente que convierte estos actos en el portal de la litrona".

En este sentido, ha adelantado que Adebo pedirá "un día de luto local" en el municipio y que el 29 de diciembre se sumarán a otras organizaciones por los derechos de los animales, que han convocado una marcha en la Plaza Nueva de Lucena para protestar por estos hechos, y que cuenta con la "solidaridad" de la Fundación Juan Ramón Jiménez.