La de Rafael Carrillo Maestre es una vida dedicada a su vocación y a su familia. Una vocación empresarial por el mundo de la hostelería y una familia que ha sabido implicarse hasta el extremo de ser difícil saber dónde acaba la familia y dónde la empresa.
Aunque fue en 1970 cuando abrió sus puertas por primera vez el entonces Mesón El Churrasco, en el que Rafael ya figuraba como propietario, su trayectoria profesional ya venía avalada por un copioso bagaje de actividad desarrollada en diversos negocios de la ciudad. Antes, mucho antes, había trabajado en varias actividades con las que contribuía a la economía familiar.
Hoy, El Churrasco es un restaurante de prestigio más que sobrado no solo en Córdoba sino también en todo el territorio nacional y en el extranjero. No en vano, cuenta en su haber con galardones concedidos en lugares tan lejanos como Nueva York. Y todo ello sin salir de la Judería, el enclave desde el que la familia Carrillo ha sabido proyectar la gastronomía y la cocina cordobesa a todo el mundo.
En este éxito, explica el empresario, ha jugado un papel fundamental su mujer, Mari Rodríguez, que se unió a su vida en el año 1957, cuando se conocieron, y confirmó el compromiso de continuidad diez años después con su boda. Con ella al frente de los fogones y con él atendiendo al público, auspiciado por un equipo profesional de primer nivel, El Churrasco ha sabido mantener el listón de su calidad y de servicio y el éxito empresarial durante 40 años largos.
Cuatro décadas que ahora tienen un futuro asegurado con la reciente incorporación de su hijo, también Rafael, al frente de los negocios y de su hija, Lola, para continuar con una actividad que se ha visto completada hace una década con un hotel con encanto, la Hospedería El Churrasco, que viene a mejorar con el alojamiento las altas prestaciones que ya ofrecía el restaurante.
Señala Rafael Carrillo que conseguir la distinción de Córdobés del Año que otorga Diario CÓRDOBA es para él "todo un orgullo‡", porque recuerda que muchos años este jurado se ha reunido en su negocio, "lo que ya para mí era todo un honor, pero que me lo concedan a mí, lo es mucho mayor‡", porque "supone un reconocimiento al enorme esfuerzo que durante tantos años he realizado junto con mi familia por sacar el negocio adelante y difundir el nombre de Córdoba entre cordobeses y visitantes".
