El portavoz municipal del PP, José María Bellido, denunció ayer «el caos, la tensión y el enfrentamiento» que, en su opinión, hay entre los socios del gobierno local (PSOE-IU), que se ha puesto de manifiesto por las distintas posturas que uno y otro partido mantienen por una carpa instalada en el ruedo de la plaza de toros y con el servicio de ayuda a domicilio.

Por un lado, Bellido dijo que mientras que la Gerencia de Urbanismo (GMU), gobernada por IU, dio autorización para una fiesta de primavera en una carpa en el coso de Los Califas, el área de Seguridad, cuya gestión corresponde al PSOE, desautoriza tal permiso. A este respecto, el concejal del PP indicó sobre la celebración de ese evento que «ha habido molestias y quejas de los vecinos», y recordó que el teniente de alcalde de Presidencia y Seguridad, Emilio Aumente (PSOE), ha manifestado que «la intención es no autorizar más actividades”, y «con advertencia expresa para trasladar a Urbanismo esta problemática para hacer ver que no se van a dar más autorizaciones», Bellido agregó que el primer teniente de alcalde y presidente de la Gerencia de Urbanismo, Pedro García (IU), apoya la instalación de esta carpa. En este sentido, advirtió de que en este asunto «hay dos posturas». Por una parte, desde Urbanismo «están diciendo una cosa y diciendo absolutamente la contraria desde el área de Seguridad», motivo por el que el PP va a pedir «todos los informes desde la instalación de la carpa y la autorización para instalarla hasta los elaborados por Seguridad Ciudadana» para aclarar el tema, según dijo el portavoz popular.

AYUDA A DOMICILIO // En cuanto al segundo asunto en el que el PP cree que existe un enfrentamiento entre los socios de gobierno, Bellido señaló que «la nefasta gestión que el gobierno local ha hecho del servicio de ayuda a domicilio», cuyo contrato de adjudicación ha sido devuelto desde el área de contratación a Servicios Sociales, ha provocado que la empresa que lo gestiona renuncie a la prórroga que le correspondía. Al respecto, indicó que “se iba a sacar un nuevo pliego de contratación», pero añadió que en el mismo «hay tensiones y discrepancias fuertes dentro del gobierno local, porque hay una parte del gobierno que quiere que el pliego solo dure un año hasta municipalizar el servicio y otra que dice que tiene que ser un contrato de dos años, más uno prorrogable.