La cifra de muertes en las carreteras cordobesas ha descendido un 60% desde que entró en vigor el carnet de conducir por puntos, al pasar de los 54 fallecidos registrados en el 2006 a los 22 del año pasado. Este dato, además, es el más bajo desde 1964 y un 33% inferior al del 2012, cuando tras siete años de bajada hubo un repunte con 33 fallecidos. Unos registros positivos a los que han contribuido cambios normativos como el sistema del permiso por puntos, la reforma del Código Penal o las campañas de control y concienciación de la Dirección General de Tráfico (DGT), pero sobre todo, el cambio de comportamiento de los conductores, que "ya sabemos que los accidentes son evitables", según el jefe provincial de Tráfico, José Antonio Ríos Rosas.

Según los datos facilitados por la Jefatura Provincial de Tráfico, durante el 2013 las carreteras cordobesas registraron 20 accidentes mortales en los que fallecieron 22 personas y 721 resultaron heridas, unas cifras que suponen una reducción en más de la mitad respecto al 2006, cuando entró en vigor el carnet por puntos. Aquel año hubo 43 accidentes mortales, 54 muertos y 1.228 heridos graves y leves.

FACTORES En general, la evolución de la cifra de fallecidos por accidente de tráfico en Córdoba desde que existen estadísticas (1960) se resume en una tendencia ascendente desde 1965 hasta alcanzar un pico máximo en el año 1989, en el que se produjeron 100 fallecidos, y una disminución progresiva hasta alcanzar el mínimo del 2013, con 22 fallecidos. A este "importante descenso" han contribuido, según Ríos Rosas, las "diferentes acciones" que se han puesto en marcha desde la DGT, aunque insiste en que "el hito más importante descansa en que los conductores hemos salido de la confusión semántica que producía la expresión accidente de tráfico". Según explica, "hemos dejado de pensar en los accidentes como algo accidental y ya sabemos que son evitables", porque mejorando las carreteras, los vehículos "y nuestra actitud y también la aptitud al volante hemos conseguido disminuirlos" incluso con un aumento del parque de vehículos y del censo de conductores.

Así las cosas, el jefe provincial de Tráfico señala que "empezamos a plantearnos ya la visión cero ", que no es otra cosa que el objetivo de que no haya ningún fallecido por accidentes de tráfico. Para ello, apunta Ríos Rosas, el desarrollo de la tecnología tiene un papel importante con los llamados ITS, sistemas inteligentes de transporte. "Una de las ideas --añade-- es progresar en la mejor interacción vehículo-carretera que permita reducir el error humano en la conducción".