Empresas, instituciones, sindicatos y las universidades de Córdoba y Loyola Andalucía tuvieron ayer la oportunidad de sentarse en el mismo foro para analizar la situación de Córdoba, su realidad actual, pero también las potencialidades y necesidades que existen. Bajo la organización de CECO y la colaboración de la Fundación Cajasol, el rectorado de la Universidad de Córdoba acogió el Foro Empresarial Compromiso por Córdoba. El presidente de CECO, Antonio Díaz, fue el encargado de avanzar las conclusiones tras cuatro horas de debate y más de una treintena de participaciones. Cuatro fueron las ideas principales que se consensuaron para «impulsar un compromiso por Córdoba», afirmó Díaz. Los intervinientes consideran clave el fomento de las actividades empresariales favoreciendo la inversión local o foránea, pero también el apoyo a los sectores empresariales y al sector industrial y logístico para promover un desarrollo sostenible. A esto hay que unir una llamada a la generación de empleo estable y de calidad. Para ello, piensan que es esencial que se cree un clima de confianza y sentar las bases de un compromiso real para el desarrollo económico, empresarial y social. «Córdoba es una provincia repleta de oportunidades que deben ser puestas en valor a través de una actuación concertada de las administraciones públicas y los agentes económicos y sociales», remarcaron. Asimismo, dijeron que es importante una apuesta por la innovación de las empresas, que las administraciones vean que es prioritario una apuesta real por el desarrollo del sector industrial, con la eliminación de las trabas administrativas, un marco normativo estable y que mejore la tramitación de los procedimientos para que se implanten y desarrollen las empresas. Tampoco se puede olvidar la posición estratégica de Córdoba, que se debe aprovechar para «impulsar la competitividad de las empresas y el desarrollo empresarial». Junto a nuevos sectores, estiman que no se pueden olvidar otros tradicionales «que tienen mucho que aportar a la economía cordobesa». En las conclusiones se refleja también el apoyo al sector agroalimentario cordobés, se manifestó que el turismo y la cultura son esenciales en la economía y las empresas, además de reivindicar que Córdoba aspire a ser un centro del conocimiento para proporcionar ventajas al tejido productivo y a la sociedad. Para promover el compromiso empresarial, estiman que se debe potenciar la inversión en infraestructuras para favorecer la cohesión territorial, pero también consensuar políticas de desarrollo local y de captación de fondos europeos, promover la coordinación de políticas activas de empleo y elevar los niveles de formación y cualificación profesional. «Son tiempos de una auténtica y real colaboración público-privada», finalizó Antonio Díaz.
Precisamente, en la inauguración de las jornadas los representantes de las instituciones coincidieron en destacar la importancia del esfuerzo colectivo y la colaboración entre iniciativa pública y privada. El presidente de Cajasol, Antonio Pulido, afirmó que con jornadas como esta se pretende «hacer un diagnóstico de lo que es la sociedad cordobesa en todos los aspectos, y buscar soluciones y alternativas con un objetivo fundamental, que es que haya más empleo y más bienestar». La alcaldesa, Isabel Ambrosio, señaló que se requiere «más que nunca» el compromiso empresarial y colectivo para «elevar las posibilidades de nuestra tierra y la dignidad de vida de miles de cordobeses que están esperando oportunidades». «Es fundamental aprovechar las oportunidades y las sinergias», reiteró.
Por su parte, el presidente de la Diputación, Antonio Ruiz, indicó que es necesario «sentar las bases de un nuevo modelo que potencie nuestros sectores productivos y servicios, motivo por el cual desde la Diputación estamos trabajando en el Plan Impulso». Por último, la delegada del Gobierno de la Junta, Rafi Crespín, aseguró que hay que conseguir «una Córdoba competitiva e innovadora», basada en un modelo de desarrollo centrado en la I+D+i.
