El Ayuntamiento de Córdoba dejará de ingresar 5 millones de euros al haber paralizado el gobierno local la venta del edificio que albergó las oficinas centrales del Consistorio en el bulevar Gran Capitán hasta que la Corporación se trasladó a la calle Capitulares en el año 1985. Esos cinco millones de euros están registrados en el capítulo de ingresos de los presupuestos municipales del 2015, en concreto en el que corresponde a la enajenación de inversiones reales, aunque en el capítulo de gastos esta cantidad está retenida hasta tanto se produjera el ingreso.

El anterior equipo de gobierno del PP puso a la venta en el 2012 ese edificio municipal una vez que quedara libre de personal y las dependencias que albergaba pasaran al estadio de El Arcángel, traslado que recoge el plan de ajuste aprobado por el PP el pasado 30 de marzo de ese mismo año. En ese plan de ajuste aprobado para garantizar la sostenibilidad financiera de la operación de crédito de 23 millones de euros para pagar facturas a proveedores, se recogía el traslado de los departamentos que se ubicaban entonces en el edificio obsoleto de Gran Capitán a la trasera del sector de preferencia del estadio de El Arcángel. Desde entonces y hasta la fecha ningún comprador se ha interesado por adquirir el edificio, por lo que la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) ha retirado del mercado la enajenación del inmueble, según dijo ayer el teniente de alcalde de Presidencia, David Luque (PSOE), que añadió que, además, el Ayuntamiento está necesitado de espacios para albergar dependencias municipales. En septiembre del año pasado, el consejo rector de la GMU inició los trámites para innovar el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) con el objetivo de modificar la ficha del edificio, pero dicha modificación del plan urbano no se ha llevado a cabo. Actualmente, el inmueble acoge el servicio municipal de Consumo, la sede de la Televisión Municipal y el Centro de Proceso de Datos, y el próximo mes de septiembre será sede de la oficina antidesahucios. La parte trasera del edificio no se utiliza por las malas condiciones del mismo.