El secretario general de UGT, Vicente Palomares, valora la proporción de 1,2 cotizantes por cada pensionista o parado con prestación que se da en Córdoba explicando que «la situación es para alarmarse y tomar medidas cuanto antes para restablecer el sistema de pensiones».

Según detalla, este «no se está retroalimentando» debido a factores como la precarización del empleo y la bajada de los sueldos, e incide en que los trabajadores cotizan ahora menos que antes. Por esto, cree necesario buscar fórmulas de financiación y señala que «no podemos ir abocados a sistemas privados de pensiones, por su falta de solidaridad». Palomares también se dirige a los jóvenes para que, además de por la falta de empleo (el colectivo cerró el 2016 con un 40% de paro), se preocupen «y bastante» por las pensiones. En este sentido, recuerda la contribución positiva que puede suponer la campaña de UGT Ponte a 1.000 euros, para que el Salario Mínimo Interprofesional, que está en 707,7 euros, suba hasta esa cantidad.

De otro lado, la secretaria general de CCOO, Marina Borrego, afirma que la proporción ideal sería de 3 cotizantes por cada beneficiario de prestación «para que la hucha de las pensiones fuese alta». Así, explica que la aportación de los trabajadores que cotizan se destina tanto a pensiones como a ayudas por desempleo, y destaca que la proporción actual «es bajísima».

Esta sindicalista comenta que muchos cotizantes tienen contratos a tiempo parcial, por lo que la cuantía que se ingresa a la Seguridad Social se encuentra «muy por debajo» de la que se podría contabilizar si los trabajadores estuvieran a jornada completa, y apunta que la precariedad empeora aún más la situación.