El Gobierno andaluz destinará en 2018 y 2019 un total de 308 millones al nuevo programa de empleo industrial para recuperar el nivel de ocupación previo a la crisis y, de esa forma, pasar de 442.000 empleos a 533.000, y reducir la tasa de temporalidad un 10% y fijarla en el 20%. El consejero de Empleo, Javier Carnero, explicó el contenido del decreto regulador del programa de fomento del empleo industrial y medidas de inserción laboral, que prevé beneficiar a más de 54.000 personas. La nueva estrategia se desarrollará en 14 convocatorias e incluirá, entre otras medidas, actuaciones para la inserción laboral, incentivos a la contratación, planes de empleo, prácticas profesionales e iniciativas en materia de seguridad y salud y de conciliación familiar. El bloque de desarrollo local es el de mayor envergadura, con un presupuesto de 182 millones y la previsión de beneficiar a más de 30.000 desempleados. Incluye la reedición de las iniciativas de cooperación social y comunitaria en vigor, desarrolladas por los ayuntamientos y destinadas a la contratación de jóvenes desempleados menores de 30 años, mayores de 30 y, como novedad, parados mayores de 45. En el capítulo de fomento del empleo, que prevé beneficiar a 8.800 desempleados con un presupuesto de 71,75 millones, se establecen incentivos a la contratación para a favorecer la creación de puestos de trabajos estables y la transformación de contratos temporales en indefinidos.

El tercer bloque, dotado con 40,5 millones, se centra en la mejora de la empleabilidad e incluye proyectos integrales de inserción que desarrollarán entidades sin ánimo de lucro, universidades y asociaciones del sector industrial, con una previsión de más de 13.600 personas beneficiarias.